Georgia celebra hoy unas elecciones legislativas en las que el partido oficialista, Sueño Georgiano, liderado por el primer ministro, Gueorgui Kvirikashvili, es el gran favorito a la victoria, según todas las encuestas.
Los colegios electorales abrieron sus puertas a las 07.00 hora local (04.00 GMT) a los más de tres millones y medio de georgianos con derecho al voto, un tercio de los cuales viven en la capital, Tiflis.
Un 36 % de los georgianos está dispuesto a votar por Sueño Georgiano, el partido que desbancó del poder a Mijaíl Saakashvili en 2012, mientras sólo un 13 % apoyará al opositor Movimiento Nacional Unido (MNU), según los sondeos.
La lista oficialista es encabezada por Kvirikashvili, mientras el expresidente del Parlamento David Bakradze es el rostro del MNU, aunque todos ven aún a Saakashvili como el líder en la sombra.
La prensa destaca que hay muchos indecisos, ya que el Gobierno no ha logrado cumplir con las expectativas creadas, especialmente en materia de lucha contra la corrupción y mejora del nivel de vida de la población, aunque la economía creció una media del 3,6 % en los últimos tres años.
Los analistas no esperan que el resto de partidos que participan en los comicios -19 formaciones y 6 bloques- logren superar la barrera del 5 % de votos necesarios para acceder al arco parlamentario.
La coalición Sueño Georgiano ocupa en la actualidad 85 de los 150 escaños en el Parlamento georgiano, mientras que el MNU tiene los 65 restantes.
Los comicios están marcados por la alargada sombra del expresidente Saakashvili, exiliado en Ucrania y al que el Gobierno acusa de intentar sabotear los comicios.
Según las autoridades, Saakashvili y cinco de los diputados del opositor MNU conspiraron recientemente para denunciar el fraude electoral y provocar protestas antigubernamentales en caso de derrota.
Saakashvili, presidente georgiano entre 2004 y 2012, tachó la supuesta grabación colgada en Youtube de pura invención, pero el Servicio de Seguridad Nacional de Georgia (antiguo KGB) ha abierto una investigación penal.
Desde la reforma que entró en vigor en 2013, el presidente georgiano ejerce funciones representativas, por lo que es el primer ministro el que tiene ahora casi todo el poder ejecutivo, incluida la política exterior.
Por ello, las elecciones son muy importantes para este país, entre cuyas prioridades figura el ingreso en la Unión Europea y en la OTAN, bloque militar con el que coopera en varias misiones de paz.
De los 150 escaños del Parlamento de este país caucasiano, 77 se eligen por listas de partidos y 73 por circunscripciones electorales unipersonales.