El príncipe Takahito de Mikasa, tío del emperador de Japón y el miembro más anciano de la familia imperial, falleció hoy a los 100 años de edad, según informó la Agencia de la Casa Imperial.

El príncipe había sido ingresado en un hospital de Tokio a mediados de mayo a causa de una neumonía aguda, y desde entonces hospitalizado y dado de alta en varias ocasiones debido a esa enfermedad y a problemas de corazón.

El príncipe Takahito de Mikasa era el hermano menor del difunto emperador Hirohito y se convirtió en diciembre del año pasado en el primer centenario de la familia imperial de Japón desde que el país se abrió a Occidente en el siglo XIX.

Nació el 2 de diciembre de 1915 y sirvió en el regimiento de caballería durante la II Guerra Mundial después de graduarse de la academia militar. Más adelante estudió historia oriental en la Universidad de Tokio.

Takahito fue uno de los integrantes de la monarquía nipona que se mostró más crítico con la actuación en el conflicto del ejército imperial, cuyas atrocidades le impactaron cuando se encontraba en el frente, tal y como plasmó en el libro "La historia del antiguo Oriente y yo" que publicó en 1984.

"Todavía hoy siento constantemente el aguijón de la conciencia por mi incapacidad para asimilar completamente la criminalidad de la guerra", escribió.

En 1941, Takahito se casó con la princesa Yuriko de Mikasa, que en junio cumplió 93 años. Con ella concibió cinco vástagos, dos hijas y tres hijos, los príncipes Takamado, Tomohito y Katsura, quienes fallecieron en 2002, 2012 y 2014, respectivamente.

Ejerció como académico reconocido de historia antigua de Oriente y fue presidente honorífico del Centro Cultural de Oriente Medio en Japón y de la Sociedad Japón-Turquía.

El tío del emperador Akihito se sometió a una cirugía de corazón en 2012, pero se recuperó y mantuvo un buen estado de salud hasta su hospitalización este año.

El príncipe vivía con su esposa en su residencia en Tokio y entre otras aficiones disfrutaba de ver sumo en televisión.

Su última aparición pública tuvo lugar el pasado enero, cuando se le pudo ver en el balcón del Palacio Imperial de Tokio junto a su esposa mientras el emperador pronunciaba su tradicional mensaje de año nuevo dirigido al pueblo japonés.

El primer ministro japonés, Shinzo Abe, transmitió sus condolencias por el fallecimiento del príncipe en un comunicado en el que destacó la contribución "a la paz del país y al bienestar de su gente".

La muerte del príncipe Mikasa, quien era el quinto en la línea sucesoria al trono del Crisantemo, reduce a cuatro el número de hombres de la familia imperial nipona, dado que las mujeres que nacen en su seno pierden su estatus de realeza al contraer matrimonio.