La justicia francesa sospecha que el banco helvético UBS incitó a residentes franceses a evadir a Suiza como mínimo 9.700 millones de euros que quedaron así exentos del pago al fisco, según revela hoy el diario "Le Parisien".

Los magistrados que instruyen en Francia el presunto fraude cometido por UBS, Guillaume Daïef y Serge Tournaire, estiman que la entidad gestionó en Suiza entre 12.200 y 23.000 millones de euros de dinero de residentes franceses, una parte importante de los cuales no declarado.

La dimensión de esas maniobras de evasión quedan en evidencia con el testimonio de una funcionaria del Ministerio de Finanzas, que explicó a los jueces que hasta el 30 de septiembre de 2015 unos 4.000 clientes de UBS había pedido regularizar su situación y dieron cuenta de 3.770 millones de euros que no habían declarado.

La Fiscalía Nacional Financiera, en su requisitoria definitiva para llevar a juicio a UBS, consultada por "Le Parisien", considera que "el principal servicio" que ofrecía el banco suizo a sus clientes era "la posibilidad de beneficiarse del secreto fiscal" que había en Suiza.

El Ministerio Público destacó que diversos testimonios definían la entidad como "un banco que basa su modelo de negocios en las cuentas no declaradas".

De acuerdo con sus conclusiones, para captar en Francia el dinero de personas adineradas (abogados, deportistas, empresarios, ricos herederos), UBS organizó entre 1999 y 2008 entre 80 y 100 invitaciones dirigidas a esos grupos específicamente.

Se trataba de cacerías, torneos de golf, conciertos de ópera, atribuciones de plazas preferentes en acontecimientos deportivos como el torneo de tenis de Roland Garros en París con las que convencer a clientes para que llevaran el dinero a Suiza.

Al frente de esos eventos para un público selecto había comerciales enviados directamente desde Suiza por UBS para persuadirles de que sacaran el dinero de Francia y escaparan al fisco.

El que fuera presidente del directorio de UBS en Francia, Jean-Louis de Montesquiou, reconoció a los investigadores haber recibido informaciones de la presencia de esos comerciales.

El interés para UBS es que los márgenes en la gestión de esas cuentas no declaradas eran muy superiores.