La policía marroquí desmanteló ayer en Fez y Tánger una célula terrorista compuesta por ocho personas, supuestamente miembros del llamado Estado Islámico (EI) o Daesh por su acrónimo árabe, según reveló hoy en un comunicado el ministerio del Interior.

Dos de los arrestados son antiguos presos, que cumplieron pena de cárcel por su pertenencia a un comando terrorista dirigido por un francés y que fue desmantelado en 2003.

En posesión de los detenidos ayer se ha encontrado un fusil de caza no declarado, varias armas blancas y materiales químicos susceptibles de ser usados para fabricar explosivos.

Los detenidos estaban en contacto con miembros del Daesh en Irak y Siria, en tareas de reclutamiento de adeptos para ser enviados a llevar a cabo la yihad en esos países y con el fin también de preparar atentados en Marruecos tras su vuelta, acusaciones que son recurrentes en cada desmantelamiento de supuestas células extremistas.

Por su parte, el diario Asabah añade otros detalles, como que los detenidos son en su mayoría hombres casados y con hijos, de extracción social baja ya que ejercen trabajos como jornalero agrícola, zapatero o chófer.

El diario asegura que los detenidos estaban siendo vigilados desde hace meses, principalmente en su actividad en las redes sociales, donde manifestaron sus simpatías extremistas y tejieron vínculos con correligionarios en Irak y Siria.