Choi Soon-sil, conocida como la "Rasputina" surcoreana, pagó varios tratamientos estéticos a su amiga íntima y presidenta de este país, Park Geun-hye, según reveló hoy el comité parlamentario que investiga el escándalo de corrupción en torno a la mandataria.

Choi abonó supuestamente 1,13 millones de wones (894.300 euros/ 936.360 dólares) a una clínica de tratamientos anti-envejecimiento de Seúl entre 2011 y 2014 por 27 servicios prestados a la presidenta, señaló hoy el diputado Hwang Young-cheul, miembro del citado comité.

Estas transacciones arrojan nuevas pruebas sobre la relación entre ambas, una novelesca trama de extorsiones y tráfico de influencias que ha llevado al Parlamento a destituir a la presidenta, señaló Hwang en declaraciones a la agencia surcoreana Yonhap.

Las facturas a las que ha tenido acceso el comité parlamentario incluyen un total de 29 tratamientos abonados por Choi y por su hermana, Choi Soon-deuk, que los firmaron con pseudónimos como "VIP", "Presidenta Park" y "Azul", lo que podría ser una alusión a la Casa Azul (nombre que recibe la oficina presidencial surcoreana).

Entre ellos se incluyen 27 servicios prescritos para la propia Park como análisis de sangre y tratamientos anti-edad personalizados, según el comité, que también señala que la hermana de Choi abonó otros 1,1 millones de wones (870.000 euros/911.000 dólares) del coste total de los mismos.

Los investigadores están tratando de determinar la naturaleza de los pagos, que se añadirían a las prendas de ropa y bolsos que Choi regaló a Park y que podrían suponer delitos de soborno, aunque según la oficina de la presidenta, ésta devolvió el importe de todos estos bienes.

"La prescripción de tratamientos para Park a través de intermediarios y abonados por Choi arroja nuevas sospechas sobre el caso", señaló Hwang, uno de los exdiputados del partido gobernante críticos con la presidenta que ha abandonado esta formación para crear una nueva.

Por otro lado, el grupo especial de la Fiscalía surcoreana que trata el caso informó hoy de que ha registrado las consultas de varios médicos, en especial la de un cirujano plástico de Seúl que se cree trató a la presidenta por mediación de Choi y sin los debidos protocolos.

Se sospecha que el cirujano pudo administrar ilegalmente a Park el anestésico propofol para un tratamiento, algo que explicaría la no comparecencia de la presidenta durante las primeras horas tras el naufragio en abril de 2014 de un ferry surcoreano que costó la vida a más de 300 pasajeros, en su mayoría estudiantes de secundaria.

La "Rasputina surcoreana", actualmente en la cárcel, está acusada de haber intervenido en asuntos de Estado a pesar de no ocupar cargo público alguno y de haber extorsionado a empresas para obtener cuantiosas sumas de dinero que se habría apropiado parcialmente, entre otros cargos.