El Gobierno británico dijo hoy que mantiene sus planes de activar el "brexit" antes de finales de marzo, a pesar del dictamen del Tribunal Supremo que le obliga a consultar con el Parlamento antes de hacerlo.

En un comunicado, un portavoz gubernamental señaló que el Ejecutivo de la primera ministra, la conservadora Theresa May, "respeta" la decisión de la corte y anunció que en breve expondrá ante la Cámara de los Comunes los pasos a seguir.

"El pueblo británico votó por salir de la UE, y el Gobierno cumplirá con este veredicto, activando el artículo 50, como estaba planeado, para finales de marzo. El dictamen de hoy no cambia nada", afirmó la fuente.

"Es importante recordar que el Parlamento respaldó (la celebración de) el referéndum por un margen de 6 a 1 y ha indicado ya que apoyará impulsar el proceso de salida (de la UE) conforme al calendario que hemos marcado", añadió.

Previamente, el abogado general del Estado, Jeremy Wright -que representó al Gobierno ante el Supremo-, mostró su "decepción" por el veredicto de la corte, que rechazó el recurso del Ejecutivo para ejecutar unilateralmente el "brexit" en virtud de una antigua prerrogativa real.

"El Gobierno acatará el veredicto del tribunal y hará todo lo necesario para aplicarlo", manifestó.

El Tribunal Supremo, máxima instancia judicial del país, desestimó hoy el recurso presentado por el Ejecutivo contra una sentencia del 3 de noviembre que le obligaba a obtener la aprobación del Parlamento antes de invocar el artículo 50 del Tratado de Lisboa, lo que dará inicio a los dos años de negociaciones con Bruselas para salir de la Unión Europea.

El Gobierno indicó anteriormente que, en caso de perder el recurso, presentaría un breve proyecto de ley en la Cámara de los Comunes pidiendo autorización para activar el artículo 50.

El Partido Laborista, primero de la oposición, ha adelantado que, aunque votará a favor de la ley de activación del artículo, prevé presentar varias enmiendas, a fin de garantizar más control parlamentario durante el proceso de negociación.

Aunque puede haber oposición de otros grupos parlamentarios, e incluso laboristas y conservadores que voten en contra del proyecto legislativo, se espera que éste pueda ser eventualmente aprobado sin problemas gracias a la mayoría parlamentaria "tory".