La revista alemana Der Spiegel recibió hoy fuertes críticas de otros medios por la portada de su nuevo número, en la que aparece el presidente de EE.UU., Donald Trump, con la cabeza decapitada de la estatua de la libertad en una mano y un machete ensangrentado en la otra.

El semanario, considerado uno de los medios más influyentes del país, incluye además un editorial en el número lanzado hoy en el que se acusa al presidente republicano de "intentar un golpe de Estado desde arriba" y de tratar de "establecer un democracia no liberal" en EE.UU.

El diario popular Bild ha criticado a la revista de comparar a Trump con los islamista del Estado Islámico (EI) y le ha acusado de volver a caer en el "antiamericanismo" de ocasiones anteriores -y cita la presidencia de George W. Bush.

El Frankfurter Allgemeine Zeitung, por su parte, considera que la portada carece de ironía y que la analogía del presidente estadounidense y los yihadistas es simplista, además de alimentar las diferencias que Trump tiene con los medios.

"La portada de Der Spiegel es exactamente lo que necesita Trump: una imagen distorsionada de sí mismo que puede utilizar para su propia imagen distorsionada de los medios", argumenta este diario.

Para Die Welt la portada "daña al periodismo" más que al presidente, ya que "confirma los prejuicios de mucha gente" de que "medios mayoritarios" no son neutrales y que "muchos periodistas prefieren promover su visión del mundo en lugar de ser testigos neutrales de lo que sucede".

La portada ha sido diseñada por Edel Rodríguez, un cubano que llegó a EE.UU. como refugiado político en 1980, y que ha explicado en declaraciones al diario estadounidense The Washington Post que con la comparación trataba de indicar que Trump, como los islamistas del EI, "son extremistas".