Los siete líderes del sindicato de médicos condenados a un mes de prisión por no poner fin a la huelga sanitaria en Kenia han sido puestos en libertad hoy tras multitudinarias protestas celebradas en diferentes ciudades del país para exigir su excarcelación.

La jueza Hellen Wasilwa había decretado el lunes prisión para estos médicos tras ser acusados de un delito de desacato por incumplir el plazo otorgado por el tribunal para acabar con el paro, que ya ha provocado la muerte de al menos 20 pacientes por la falta de atención médica en los hospitales públicos, según los medios locales.

Los abogados del sindicato de médicos, farmacéuticos y dentistas del país (KMPDU, en sus siglas en inglés) recurrieron esta condena y finalmente el Tribunal de Apelación ordenó hoy su liberación con la condición de que se reanuden las negociaciones durante los próximos siete días.

Los líderes sindicales tendrán que presentarse de nuevo el próximo 23 de febrero ante el tribunal para examinar estas negociaciones, que mediará la Comisión de Derechos Humanos de Kenia (KNCHR), y tendrán que poner fin a esta huelga, que desde hace dos meses ha provocado una grave crisis sanitaria.

Esta mañana centenares de personas se concentraron en Nairobi frente al Tribunal Supremo para mostrar su solidaridad con los médicos.

"Ninguna negociación mientras los médicos estén en prisión" o "En realidad es el ministerio de Salud el que está en huelga. No los médicos", decían algunas pancartas durante la concentración en la capital.

Los sanitarios también salieron a la calle en otras ciudades kenianas, como Kisumu, en el oeste del país, mientras que algunos hospitales privados decidieron apoyar la huelga del servicio público cerrando su instalaciones durante 48 horas.

Doctores y enfermeras comenzaron una huelga nacional el pasado 5 de diciembre para reivindicar mejores condiciones de trabajo y salarios tras el fracaso del diálogo entre los sindicatos y el Ministerio de salud.

Desde entonces, los sanitarios han realizado numerosas protestas en las calles del país y se han vivido escenas de caos en los hospitales públicos, donde los pacientes han tenido que irse a su casa ante la falta de atención médica.

Desde el inicio del paro, los enfermeros y médicos advirtieron a las autoridades de que debían estar preparadas para "la huelga más larga de la historia".

Tres relatores de derechos humanos de la ONU urgieron ayer al Gobierno keniano a cesar las "represalias sistemáticas" contra grupos de la sociedad civil que se han intensificado de cara a las elecciones previstas para agosto.