El presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, ha lamentado este miércoles si "alguien" ha podido ofenderse por sus comentarios "malinterpretados" sobre los países del Sur de Europa, de los que dijo que habían gastado el dinero en "alcohol y mujeres", pero ha remarcado que no tiene intención de dimitir.

"Lamento si alguien se ha ofendido por mi comentario. Era directo y puede ser explicado desde la estricta cultura calvinista holandesa, desde la franqueza holandesa", ha afirmado en un comunicado. "No tengo intención de dimitir", ha añadido.

Además, el también ministro de Finanzas holandés ha afirmado que la frase sobre alcohol y mujeres se refería a él mismo. "Dije que yo no podría esperar que si gasto mi dinero de una forma equivocada puedo pedir después apoyo financiero", ha argumentado.

De la misma forma, Dijsselbloem remarca de nuevo que en la entrevista subrayó la importancia de "la solidaridad y la reciprocidad" dentro del bloque comunitario, en el que "todos deben mantener los acuerdos", sobre todo "cuando en un punto necesitas asistencia financiera y cuando pides al resto apoyo financiero".

"El mensaje de la solidaridad va de la mano con mantener los acuerdos y ceñirse a las normas. Esto no sólo se aplica al Sur, se aplica a todos los países", ha destacado, para después añadir que para "fortalecer" la unión monetaria" es "importante" que todo el mundo "respete las normas y los compromisos". "Es un principio básico", ha enfatizado.

"Lamento que mi mensaje se haya malinterpretado y lamento que haya surgido como el Norte contra el Sur", explica Dijsselbloem, antes de afirmar que "muchos países de Europa, incluyendo el Sur", han adoptado "profundas reformas en los últimos años", un "esfuerzo" que "debe continuar" porque "no hay espacio para la complacencia".

Al mismo tiempo, el presidente del Eurogrupo se ha mostrado convencido de que es "apreciado" por su "propio estilo" y por la "franqueza" con la que se dirige a todos los ministros". "Sí, mi estilo es directo y, de nuevo, si la gente se ofende lo siento, por supuesto. Pero creo que necesitamos ser claros, por el futuro de la unión monetaria y del Eurogrupo debemos todos hacer lo máximo y respetar las reglas", ha insistido.

JUNCKER: EL COMENTARIO "NO REFLEJA SU PENSAMIENTO"

Por otra parte, el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, ha asegurado que los comentarios "que parece haber dicho" el presidente del Eurogrupo "no refleja su pensamiento profundo".

"Creo que eso que parece haber dicho no refleja su pensamiento profundo", ha dicho el jefe del Ejecutivo comunitario en una rueda de prensa conjunta con el presidente de Portugal, Marcelo Rabelo de Sousa, de cuyo país ha señalado que siempre ha sido testigo de una "amistad inigualable".

A su vez, el presidente del Parlamento Europeo, el italiano Antonio Tajani, ha criticado las palabras de Dijsselbloem, y ha apuntado que en la actualidad, "más que nunca", es necesario "ir más allá de prejuicios y estereotipos".

"Nadie tiene el derecho de ofender a ninguna nación o sociedad con comentarios racistas o sexistas", ha expresado, también en una rueda de prensa conjunta con el presidente portugués.

La polémica surge por las palabras del holandés en una entrevista en el diario alemán ''Frankfurter Allgemeine Zeitung''. "Como socialdemócrata considero la solidaridad extremadamente importante. Pero quien la exige, también tiene obligaciones. No puedo gastarme todo mi dinero en alcohol y mujeres y a continuación pedir ayuda. Este principio se aplica a nivel personal, local, nacional e incluso a nivel europeo", opinó.

Esta declaración ha levantado numerosas críticas, entre ellas las del Gobierno de Portugal, que ha pedido oficialmente la dimisión del laborista de Países Bajos por considerar que "no está en condiciones de seguir al frente del Eurogrupo".

También ha sido criticado por su propia familia política, el Partido de los Socialistas Europeos (PES), que ha calificado de "inaceptables" las declaraciones y ha asegurado que "no reflejan de ninguna manera la opinión" del partido. De la misma forma, el grupo de Socialistas y Demócratas (S&D) de la Eurocámara ha pedido a Dijsselbloem que abandone el cargo.