El director de la presa del Éufrates, el ingeniero Ahmed al Husein, fue asesinado hoy en circunstancias aún confusas después de que accediera a la infraestructura, situada en el noreste de Siria, para reparar posibles daños, informaron activistas y un antiguo directivo de esas instalaciones.

El ex ingeniero jefe de la presa Abdel Yauad Sukran dijo por teléfono que Al Husein falleció, junto a otro técnico, en un ataque "de una parte desconocida" la pasada madrugada en la calle Fayez Mansur de la población de Al Tabqa, próxima a la presa y ubicada en el oeste de la provincia nororiental de Al Raqa.

"El grupo de técnicos fue atacado tras abandonar la presa, donde habían intentado reparar la compuerta de emergencia para drenar agua", explicó Sukran, quien se encuentra en Turquía pero que mantiene contacto con fuentes en Al Tabqa, donde residen gran parte de los trabajadores de la presa.

Por su parte, el grupo de activistas "Al Raqa Está Siendo Masacrada en Silencio" informó en su cuenta de Telegram de la muerte de Al Husein y de que varios técnicos resultaron heridos en un supuesto ataque de aviones de la coalición internacional para ayudar a las tropas en su intento de irrumpir en la presa.

Tanto la presa, que es la mayor de Siria, como la urbe de Al Tabqa están controladas por el grupo terrorista Estado Islámico (EI) y en los últimos días sus inmediaciones han sido escenario de combates entre los yihadistas y las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), una alianza armada liderada por milicias kurdas.

Las FSD anunciaron ayer una suspensión de sus operaciones en los alrededores de la presa para permitir que los técnicos accedieran a ella para inspeccionarla y arreglar posibles daños, después de que la agencia de noticias Amaq, vinculada a los radicales, asegurara que estaba al borde del derrumbe por los bombardeos.

Las FSD tienen el apoyo de los aviones de la coalición internacional encabezada por EEUU y de miembros de las fuerzas especiales estadounidenses sobre el terreno.

Por su parte, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos indicó que los datos sobre el destino de Al Husein son confusos, y solo confirmó que este ingeniero y los técnicos que lo acompañaban fueron blanco de un ataque, sin especificar su autoría ni si hubo víctimas.

Al Husein apareció ayer en un vídeo publicado por Amaq en el que hablaba de daños en la presa causados por los bombardeos, que habían dejado fuera de funcionamiento la instalación, pero no se sabe si se dejó ver de forma voluntaria en la grabación o si fue coaccionado por los radicales.