El líder socialdemócrata alemán, Martin Schulz, dijo hoy sentirse "confiado" de cara a las elecciones generales de septiembre, a pesar de la derrota de su partido en los comicios regionales de ayer en Renania del Norte-Wesfalia, aunque reconoció que el camino que queda por delante no es fácil.

El camino hasta las elecciones al Bundestag, la cámara baja del Parlamento alemán, el 24 de septiembre próximo será "pedregoso y duro", pero el Partido Socialdemócrata (SPD) es una formación "muy experimentada", dijo Schulz en una comparecencia ante la prensa en la Willy-Brandt-Haus, la sede del partido, en Berlín.

El líder socialdemócrata reconoció que la derrota de ayer ante la Unión Cristianodemócrata (CDU) de la canciller alemana, Angela Merkel, que se impuso por tercera vez consecutiva en unos comicios regionales, "es un momento difícil" que su partido tiene que asumir, aunque dijo estar "confiado".

Según Schulz, los socialdemócratas tiene el mejor programa y el más adecuado para conducir al país a un futuro estable en materia económica, política y social.

Agregó que las correspondientes comisiones del partido discutirán y analizarán hoy y mañana los resultados de los comicios, al tiempo que aseguró que aunque asumir una derrota "no es fácil", los socialdemócratas están "decididos a aceptar el desafío".

"Las elecciones las ganamos juntos y las elecciones las perdemos juntos", dijo.

Al mismo tiempo, dio las gracias a la derrotada candidata en Renania del Norte-Westfalia, Hannelore Kraft, al frente de este estado federado desde 2010, por la "grandeza" con la que representó al partido "ayer en estos momentos difíciles", y afirmó que "ha luchado como una leona".

Kraft, por su parte, dijo que la responsabilidad de lo ocurrido en Renania del Norte-Westfalia en los últimos días y semanas recae sobre su persona y aseguró que la asume "con la cabeza bien alta".

Esta derrota, por muy "amarga" que sea, es al mismo tiempo "un llamamiento a toda la SPD a luchar para las elecciones" generales de septiembre, afirmó Kraft, quien ya anoche anunció que dimitía de su cargo como líder regional de los socialdemócratas.

Se mostró convencida de que en sus siete años al frente del gobierno regional, los socialdemócratas han logrado un considerable impulso para Renania del Norte-Westfalia, pero son los electores los que han decidido, dijo, y subrayó que "eso es democracia".

La CDU, liderada en este estado federado por Armin Laschet, obtuvo ayer el 33 % de los votos -un aumento de 6,7 puntos respecto a 2012-, mientras que el SPD de Kraft perdió 7,9 puntos y sumó el 31,2 % de apoyos, según los resultados provisionales.

Los liberales del FDP subieron 4 puntos hasta el 12,6 % y la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) logró entrar en su decimotercer parlamento regional sumando el 7,4 % de apoyos, mientras que Los Verdes perdieron 4,9 puntos y recibieron el 6,4 %.

La Izquierda -aglutinadora de poscomunistas y disidentes del SPD- y Los Piratas, con el 4,9 % y el 0,9 % de los votos, respectivamente, quedaron fuera del arco parlamentario.