Venezuela volvió a vivir un día de protestas con final violento y que se saldó con un joven asesinado presuntamente por un guardia nacional, mientras la Asamblea Constituyente sigue siendo el punto de conflicto que impulsa las actuales movilizaciones en contra del Gobierno de Nicolás Maduro.

El día empezó con una nueva marcha convocada por la oposición reunida en la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) para respaldar a la fiscal general, Luisa Ortega, que podría ser enjuiciada por el Supremo después de que introdujera recursos legales que son contrarios al chavismo, incluyendo amparos contra la Constituyente.

La MUD había convocado manifestaciones en todo el país y la de Caracas fue dispersada con gases lacrimógenos y, según diputados opositores presentes en la movilización, también con perdigones.

Poco después de dispersada la protesta, un grupo de manifestantes se mantuvo en la autopista Francisco Fajardo, la principal vía de Caracas, y se enfrentó a funcionarios de la Guardia Nacional (GNB, policía militarizada) escenario en el que se informó del fallecimiento de un joven de 22 años por disparos y varios heridos.

Efe constató como el joven caía herido después de recibir a pocos metros de distancia varios disparos de una escopeta de perdigones por parte de un agente de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB).

El líder opositor venezolano Henrique Capriles difundió en las redes sociales un vídeo del canal en línea Vivo Play en el que se observa a uniformados disparando directamente al cuerpo a un grupo de manifestantes.

"A quemarropa. Cumplen tus órdenes al pie de la letra Nicolás Maduro, y hoy le dijo a la prensa internacional que sus esbirros usan agua y lacrimógena", agregó Capriles en otro mensaje.

La alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) convocó a una nueva protesta para este viernes que consistirá en un "trancazo" de calles al mediodía para manifestar por la muerte de este joven.

Maduro, entretanto, alabó hoy en una rueda de prensa con medios internacionales el "esfuerzo heroico" que a su juicio están haciendo la GNB y la estatal Policía Nacional Bolivariana (PNB) en su trabajo en las marchas opositoras.

"Sin armas de fuego. Están prohibidas. Sin escopetas de perdigones. Están prohibidos. Con agua y el gasecito lacrimógeno, que está permitido", agregó Maduro, que recordó que han sido detenidos tres funcionarios de la GNB por su supuesta vinculación con la muerte por herida de bala de un manifestante el lunes pasado.

"Si hay un solo caso, como lo ha habido, al segundo de detectarse ha sido capturado y entregado a las autoridades, y yo he ordenado una investigación para ver si detrás no hay una conspiración", dijo sobre el incidente en el que murió por herida de bala el manifestante de 17 años Fabián Urbina.

Maduro también advirtió hoy de que las personas que saboteen la elección de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) a la que ha convocado, prevista para el 30 de julio, serán detenidas, una advertencia que realizó horas después de que la MUD convocara a nuevas protestas para detener ese proceso para modificar la Carta Magna.

"Todo el que sabotee un proceso electoral va a ser detenido antes, durante y después de su intento de sabotaje al proceso electoral y será juzgado", dijo el presidente.

Señaló que el Poder Electoral "está trabajando un conjunto de normas para endurecer la respuesta a estas amenazas" y recordó que el Plan República, integrado por miles de militares que custodian las elecciones en el país, será desplegado en esta contienda electoral, en la que la MUD ha rechazado participar.

Maduro también pidió a la fiscal "recobrar el equilibrio" y no utilizar ese despacho para hacer política si tiene aspiraciones de ser candidata de la oposición y calificó de "vulgaridad" el "extremismo" en el que ha caído.

Ortega ha marcado distancia del Gobierno de Maduro al denunciar una ruptura del orden constitucional por parte del Supremo cuando despojó de sus funciones al Parlamento y luego profundizó su separación al fijar una posición adversa a la Constituyente y criticar la actuación de las fuerzas de seguridad en las protestas.

El Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) anunció el martes que admitió una solicitud de enjuiciamiento a la fiscal después de que el diputado chavista Pedro Carreño introdujera un recurso en su contra acusándola de "violar la Constitución", un proceso que podría acarrear su destitución del cargo.