El gran incendio declarado el domingo en el este de la región de Ática, unos 40 kilómetros al norte de Atenas, sigue descontrolado, mientras que la situación parece estabilizarse en la isla de Zante y está parcialmente controlada en la de Cefalonia, ambas en el mar Jónico.

Según informó el Servicio Nacional de Bomberos, el objetivo primordial es controlar el principal frente del incendio ubicado entre las localidades de Kálamos y Mikrojori, en Ática oriental.

Actualmente hay tres hidroaviones y seis helicópteros que apoyan los esfuerzos de los 180 efectivos terrestres que operan en la zona con 72 vehículos y cuentan con la ayuda de más de medio centenar de voluntarios.

Por ahora no hay cifras del número de casas que han sido arrasadas por las llamas en los tres días que dura ya este incendio, pero tan solo en la primera jornada fueron destruidas total o parcialmente más de una veintena de viviendas.

En la isla de Zante, donde los incendios llevan activos desde hace cinco días, la situación es hoy algo mejor y los bomberos han logrado limitar el perímetro de seis de los ocho frentes, pero siguen sin poder controlar dos.

En la isla se encuentran 134 bomberos con 37 vehículos, 30 voluntarios y un helicóptero.

En la isla de Cefalonia, los incendios están prácticamente controlados, mientras que en el noroeste del Peloponeso se ha calmado la situación en la zona de Amaliada, pero sigue causando estragos el gran incendio en Kryoneri.

En la zona hay 42 bomberos con 20 medios terrestres, dos hidroaviones y un helicóptero.

Según indicó el Servicio de Bomberos, en las últimas 24 horas se desataron 55 incendios forestales, la gran mayoría de los cuales pudieron ser controlados inmediatamente.

Las altas temperaturas y los fuertes vientos que reinan desde hace una semana en Grecia han propiciado la propagación de incendios.