El ministro de Exteriores británico, Boris Johnson, defendió en una entrevistada publicada hoy en el tabloide "The Sun" que el periodo de transición después de la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE) debe durar dos años "y ni un segundo más".

Johnson propuso diversas condiciones para el "brexit" que van más allá de la hoja de ruta que la primera ministra, la conservadora Theresa May, puso sobre la mesa la semana pasada en un discurso en Florencia (Italia).

Antes de que comience mañana el congreso del Partido Conservador en Manchester (Inglaterra), Johnson agregó presión sobre May, debilitada dentro de su formación, al marcar nuevas "líneas rojas" que a sus ojos Londres no debe traspasar en las negociaciones con Bruselas.

El titular de Exteriores rechaza que el Reino Unido acate nuevas regulaciones comunitarias que se aprueben una vez haya comenzado el periodo de transición.

Tampoco quiere que Londres haga nuevos pagos a Bruselas una vez termine ese plazo de dos años, ni está dispuesto a que el Reino Unido se vea obligado a replicar las leyes europeas a fin de conservar el acceso al mercado único.

"No tiene sentido salir de la Unión para continuar orbitando después a su alrededor. Eso sería tener lo peor de los dos mundos. Debes ser capaz de controlar tu propio marco regulatorio", dijo.

May se prepara para intentar afianzar su liderazgo entre los "tories" en el congreso de Manchester, el primero después de las elecciones generales de junio en las que perdió la mayoría absoluta.

En un comunicado, la primera ministra afirmó hoy que si bien uno de sus objetivos es "lograr el mejor acuerdo posible para el ''brexit''", también es necesario "dar pasos en casa para construir un lugar más justo en el que vivir para la gente trabajadora ordinaria".

Una semana después de la conferencia laborista, en la que el líder de la oposición, Jeremy Corbyn, dijo que está listo para tomar el relevo en el Gobierno, May insistió en que los conservadores mantienen "la visión de un país que funcione para todos, no solo para unos pocos privilegiados".

"El contrato social en nuestro país consiste en que la siguiente generación debería siempre vivir mejor que la anterior. Los conservadores tenemos un plan para hacerlo realidad", afirmó.