Seúl estudia proponer a Washington que la fecha de sus maniobras militares anuales no coincida en 2018 con los Juegos de Invierno que se celebran en el condado surcoreano de PyeonChang para evitar una posible respuesta norcoreana durante la cita deportiva.

Al Ejército surcoreano le gustaría proponer a las fuerzas de EEUU apostadas en su territorio una nueva fecha más tardía para los ejercicios Key resolve y Foal eagle, que suelen ejecutarse en torno a marzo, y evitar así que coincidan con PyeongChang 2018, informó hoy en Seúl una fuente anónima del Gobierno a la agencia Yonhap.

Los Juegos Olímpicos de PyeongChang 2018, condado situado a unos 70 kilómetros de la militarizada frontera con Corea del Norte, se celebran entre el 9 y el 25 de febrero, mientras que la cita paralímpica se disputa del 9 al 18 de marzo.

Las maniobras de combate Foal eagle -que duran dos meses- y los juegos de guerra Key resolve -de diez días- que Washington y Seúl llevan a cabo en territorio surcoreano suelen arrancar cada año en torno a marzo (en 2017 lo hicieron el 1 y el 13 de marzo, respectivamente).

Corea del Norte condena cada año la ejecución de estas maniobras, ya que considera que constituyen un ensayo para invadir su territorio, y es habitual que responda con lanzamientos de misiles balísticos.

Seúl espera que su hermético vecino participe en PyeongChang -cosa que a falta de menos de tres meses para la cita aún no ha confirmado-, y considera que ello ayudaría a aliviar la actual crisis en la península coreana.

Aunque el régimen de Kim Jong-un lleva más de dos meses sin realizar prueba alguna de armas, los continuos ensayos de su programa armamentístico, unidos al discurso beligerante de Washington tras la llegada al poder de Donald Trump en enero, han disparado la tensión a niveles inéditos desde el fin de la Guerra de Corea.