Al menos 234 personas han muerto y otras 400 han resultado heridas, desde el pasado viernes, por los combates en Saná entre los rebeldes hutíes y las fuerzas leales al expresidente yemení Ali Abdalá Saleh, asesinado ayer por los primeros, informó hoy el Comité Internacional de la Cruz Roja.

El nuevo balance, realizado con informaciones de los centros de salud de la capital yemení, casi duplica la cifra de víctimas anunciada ayer, cuando se habían informado de 125 muertos y 238 heridos.