El volcán Agung expulsó hoy una columna de ceniza de hasta 2.100 metros de altura por encima del cráter, mientras las autoridades aseguran que el aeropuerto internacional de la isla indonesia de Bali continúa operando con normalidad, según fuentes oficiales.

El director de información de la Agencia Nacional de Gestión de Desastres (BNPB), Sutopo Purwo Nugroho, dijo en las redes sociales que la erupción tuvo lugar esta mañana y que la nube de ceniza viaja en dirección oeste.

Nugroho indicó que se mantiene la alerta de aviación naranja (un nivel menor a la alerta máxima -rojo-) y señaló que la ceniza tampoco afecta al aeropuerto de la isla de Lombok, a unos 40 kilómetros de la costa oriental de Bali.

El Agung, en el este de Bali, comenzó una fase de erupción magmática el 21 de noviembre que obligó a cerrar el aeropuerto internacional Ngurah Rai, a casi 60 km del volcán en el sur, entre el 27 y el 29 de ese mismo mes por la nube de ceniza volcánica.

Más de 100.000 pasajeros fueron afectados y miles de turistas quedaron varados en la isla durante el cierre del aeropuerto o tuvieron que viajar hasta otros aeropuertos en la isla de Java (oeste) en autobús y transbordador.

Más 66.000 personas han sido evacuadas a centros de acogida a causa del volcán, donde las autoridades esperan que se registre una nueva y mayor erupción, y mantienen un área de seguridad de 10 kilómetros alrededor del cráter y la alerta de erupción máxima.

Agung se levanta en el distrito de Karangasem, lejos de la mayoría de las atracciones, que permanecen seguras, de esta isla a la que en 2016 llegaron por vía aérea casi 5 millones de turistas extranjeros, según la operadora área del aeropuerto.

El archipiélago indonesio se asienta en el denominado "Anillo de Fuego" del Pacífico, una zona de gran actividad sísmica y volcánica que es sacudida por miles de temblores al año, la mayoría de escasa magnitud.