El Senado de Argentina aprobó hoy el Presupuesto 2018, el tercero que ejecutará el Gobierno de Mauricio Macri, y la reforma tributaria que integra el paquete de cambios en materia económica que impulsa el Ejecutivo.

Tras el visto bueno de la Cámara de Diputados, el voto positivo del Senado convirtió en ley ambas iniciativas, para las cuales el oficialismo tuvo que contar con el apoyo de parte de la oposición, principalmente un sector del peronismo.

El Ejecutivo argentino ha defendido el proyecto de Presupuesto para 2018 como "sólido", con gastos creciendo a un menor ritmo que los ingresos y la inflación y menor déficit fiscal.

"Para derrotar la inflación debemos reducir el déficit", sostuvo en el debate el presidente de la comisión de Presupuesto y Hacienda del Senado, el oficialista Esteban Bullrich.

La iniciativa prevé que el PIB de Argentina concluirá este año con un crecimiento del 3 %, mientras que en 2018 se expandirá un 3,5 %.

Asimismo, el proyecto prevé un crecimiento en la inversión bruta del 10 % este año y del 12 % en el próximo.

En tanto, la inflación proyectada para 2018 es del 10 %, con un desvío hacia arriba o hacia abajo de dos puntos porcentuales, lo que arroja un promedio anual para el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de 15,7 %.

El proyecto prevé para 2018 gastos por 2.721.450 millones de pesos (145.532 millones de dólares), un 15,1 % más que en 2017 y equivalente al 22 % del PIB.

En tanto, los ingresos proyectados ascienden a 2.325.839 millones de pesos (124.376,4 millones de dólares), con un alza interanual del 19 % y equivalente a un 18,8 % del PIB.

Por otra parte, la iniciativa fija un tope al déficit fiscal primario equivalente al 4,2 % del PIB para 2017 y al 3,2 % del PIB para 2018.

Aunque algunos sectores de la oposición votaron a favor del proyecto, desde el kirchnerismo cuestionaron la iniciativa.

"El Presupuesto 2018 expresa el programa de ajuste y endeudamiento en el que está sumida la República Argentina", afirmó en el pleno la senadora kirchnerista María de los Ángeles Sacnun.

En tanto, el peronista José Mayans sostuvo que la ley de Presupuesto "está llena de mentiras" y afirmó que al Gobierno "no mide la realidad" y "está generando cada vez más pobres".

Además del Presupuesto, en la sesión de hoy los senadores debatieron y aprobaron la reforma tributaria, que integra el paquete de cambios impulsado por el oficialismo, dentro del cual ya fueron aprobadas una polémica reforma en el sistema de pensiones y un acuerdo entre el Gobierno nacional y las provincias para ajustar las cuentas públicas.

La reforma tributaria prevé una rebaja gradual de algunos impuestos y buscará, según el Ejecutivo, incentivar las inversiones y la creación de empleo.

En su intervención en el pleno, la senadora Silvia Elías de Pérez, del gobernante frente Cambiemos, destacó la reforma tributaria como "un hito histórico" y un "alivio fiscal" que "va a sentar las bases para que aumente la inversión".

Entre otros puntos, la reforma incluye gravar la mayor parte de las rentas financieras actualmente exentas (por ejemplo, los plazos fijos) y reducir en un plazo de cuatro años la alícuota del impuesto a las ganancias corporativas para aquellas utilidades que no se distribuyan entre los accionistas, para dar más incentivos a las empresas que reinviertan sus utilidades.

También incluye cambios en los impuestos en el sector inmobiliario y en la venta de ciertos productos.