El Gobierno de Luxemburgo señaló hoy que llamará a consultas a su embajador en Moscú en respuesta al envenenamiento del exespía ruso Serguéi Skripal y su hija en el Reino Unido, un día después de anunciar que no expulsará de su país a diplomáticos rusos por el mismo caso.

"El Gobierno de Luxemburgo condena con la mayor firmeza el ataque cometido y suscribe el anuncio del Reino Unido, según el cual es altamente probable que la Federación de Rusia sea responsable de este acto y que no existe otra explicación plausible", indicó el Ejecutivo luxemburgués en un comunicado.

La víspera, el ministro de Asuntos Exteriores luxemburgués, Jean Asselborn, confirmó al diario local "Wort" que "no castigará a oficiales de Moscú si no están seguros al cien por cien de que están involucrados en actividades ilegales, como espionaje".

El periódico apuntó a que esta decisión se debe al reducido número de diplomáticos rusos que hay en el país, uno de los más pequeños de la UE, y a la "falta de pruebas".

En la nota difundida hoy, el Gobierno de Luxemburgo añadió que es "plenamente solidario con el Reino Unido frente a esta grave puesta en cuestión de nuestra seguridad común", en referencia al ataque a Skripal el pasado 4 de marzo.

Por ello, el ministro de Exteriores "ha decidido llamar a consultas al embajador de Luxemburgo en Moscú", concluye el comunicado.