El Gobierno francés anunció hoy varias medidas de reforma institucional, entre ellas la reducción de diputados y senadores en un 30 % y la introducción parcial del sistema proporcional en las elecciones.

Estas iniciativas, adelantadas ya el pasado año por el presidente de Francia, Emmanuel Macron, se unen a otras como la mención de la singularidad de Córcega y la urgencia de luchar contra el cambio climático, ambas para incluirlas en la Constitución.

Entre las medidas -anunciadas hoy por el primer ministro francés, Edouard Philippe, y que se someterán a una primera aprobación en Consejo de Ministros el próximo 9 de mayo- se incluye también la supresión de la Corte de Justicia de la República.

El Ejecutivo justifica la eliminación de este órgano, habilitado para juzgar a los miembros del Gobierno por el ejercicio de sus funciones, en que estos rindan cuentas ante tribunales ordinarios como el resto de ciudadanos.

La reducción del 30 % en el número de diputados y senadores se hará "respetando las condiciones para que se garantice la representación de todos los departamentos y territorios", explicó Philippe.

Actualmente, la Asamblea Nacional francesa cuenta con 577 escaños y 348 el Senado y, con la reforma, pasarían a unos 400 y 240, respectivamente.

Otro de los cambios emblemáticos será la elección del 15 % de los escaños en las legislativas mediante un sistema de representación proporcional, mientras que ahora se realiza únicamente con el mayoritario a dos vueltas.

El sistema proporcional, que se guía por el porcentaje de voto expresado para otorgar asientos, es una de las demandas de partidos como el ultraderechista Frente Nacional (FN) de Marine Le Pen, que se considera penalizado por las dos vueltas

Sin embargo, la propia Le Pen se ha apresurado a criticar la timidez de la reforma y la ha tildado de "limosna".

La inclusión en la Carta Magna de las "especificidades" de la región de Córcega, cuyo actual Gobierno aglutina a autonomistas e independentistas, es otras de las promesas de Macron confirmada hoy por Philippe.

"De acuerdo con los compromisos del presidente, Córcega tendrá su lugar en nuestra Constitución, lo que permitirá adaptar las leyes de la República a las especificidades insulares, pero bajo el control del Parlamento", indicó el primer ministro.

También comunicó la intención de prohibir la acumulación de más de tres mandatos, completos y consecutivos, para los alcaldes, excepto para los de localidades de menos de 9.000 habitantes.

Para los proyectos de cambio constitucional que no se sometan a referéndum, el Ejecutivo de Macron necesita al menos un 60 % de votos favorables en las dos cámaras (Asamblea Nacional y Senado), por lo que precisará del apoyo del principal partido opositor, el centroderechista Los Republicanos.