El ministro británico de Economía, Philip Hammond, advirtió hoy a la Unión Europea (UE) de que debe ayudar a definir su relación con Reino Unido tras el "brexit" y reconoció que, con su salida, Londres perderá "derechos" que tenía como socio comunitario.

Hammond realizó estas declaraciones en Berlín al intervenir en un foro de la fundación alemana de empresas familiares, en un discurso en el que apuntó que la consecución exitosa del "brexit", la salida del Reino Unido de la UE, sólo será "posible" si "ambas partes quieren" ya que esto es una conversación entre "dos".

"Hace falta dos para bailar tango", dijo Hammond en alemán ante varios centenares de empresarios, pese a reconocer que entiende el "instinto" en el continente de tratar de dejar la resolución del problema íntegramente a Londres.

El ministro británico aseguró que la UE debe comprender la postura de Reino Unido y que su país, por su parte, debe darse cuenta de que Bruselas nunca aceptará nada que asemeje una elección selectiva por parte de Londres de ciertos ámbitos de cooperación, los que le interesan.

Tras el "brexit", prosiguió, "Reino Unido no tendrá todas las responsabilidades" que tienen los miembros plenos de la UE y, obviamente, tampoco tendrá todos los "derechos": habrá de encontrarse un "nuevo equilibrio" entre las dos partes.

Hammond indicó que en las "próximas semanas" el Gobierno británico tiene intención de presentar varios "elementos claves" para una futura "relación mutuamente beneficiosa".

Entre ellos, destacó un plan de reconocimiento mutuo comprensivo (que permita que productos aprobados en un país sean reconocidos en todos); y un acuerdo que fije las relaciones de Reino Unido con las agencias europeas que regulan productos químicos, farmacéuticos y aeroespaciales.

Londres también aspira a presentar un acuerdo en el ámbito de los servicios, para el reconocimiento mutuo de cualificaciones profesionales y la libre circulaciones de personas para la realización de un trabajo.

Lo que Londres está proponiendo es "una asociación de tercer país singularmente estrecha", aunque algo cualitativamente distinto a la relación que mantiene la UE con Suiza, Noruega y Lichtenstein, matizó Hammond.

El ministro de Economía subrayó que considera "más productivo" la "aproximación colaborativa" que la de la confrontación, en reacción a las declaraciones de su compañero en el Gobierno británico, el ministro de Exteriores, Boris Johnson, que apostó hoy por aplicar a la negociación técnicas propias del presidente de EEUU, Donald Trump.

"Mi consejo a mis colegas en el gabinete es que la forma de afrontar los retos para encontrar una buena solución es acercarse al interlocutor, entender sus ansiedades y líneas rojas, y trabajar conjuntamente para lograr una solución mutuamente beneficiosa", indicó.

A su juicio, "el compromiso es siempre necesario para alcanzar una solución".