El presidente ruso, Vladimir Putin, ha pedido al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, que intenté estabilizar en la medida de lo posible la situación en la frontera entre Líbano e Israel tras el último repunte de tensión con las milicias del partido chií libanés Hezbolá.

"Rusia destacó la importancia de garantizar la estabilidad en la zona en estricto cumplimento de la resolución 1701 del Consejo de Seguridad y con la coordinación de la Fuerza Provisional de la ONU en el Líbano", según un comunicado del Kremlin recogido por la agencia oficial de noticias rusa RIA Novosti.

Netanyahu había advertido este jueves de que "hay una posibilidad" de que las fuerzas hebreas tengan que actuar en suelo libanés para destruir la supuesta red de túneles construida por el partido-milicia Hezbolá para atacar objetivos israelíes.

El primer ministro visitó la frontera acompañado de un grupo de 25 diplomáticos extranjeros a los que ha explicado en qué consiste la ''Operación Escudo Norte'' que las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) pusieron en marcha el martes para localizar y destruir los "túneles terroristas" que habría excavado Hezbolá.

Les ha indicado que Israel está decidido a "negar a sus enemigos el uso de los túneles como arma" y que, con ese objetivo, "hará lo que sea necesario". "Hay una posibilidad de que tengamos que actuar en Líbano" para impedir que se convierta en un corredor de armas iraníes, ha confesado, según informa el diario local ''Yedioth Ahronoth''.