La isla de Fuerteventura y el territorio transfronterizo hispano-portugués, de Gerês-Xurés fueron declaradas por la UNESCO "nuevas reservas de la biosfera", en el marco del Consejo Internacional de Coordinación (CIC) del Programa MaB, que se celebra estos días en la Isla de Jeju, en la Re-pública de Corea, y que eleva a 40 la cifra de incorporaciones españolas en la Red Mundial de la Biosfera.

El Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino (MARM) manifestó ayer, en un comunicado, su "satisfacción" por estas nuevas inclusiones, con las que la Red Mundial de Reservas de Biosfera alcanza un total de 551 territorios. Así, en el caso de Fuerteventura, la reserva comprende todo el territorio insular, más una franja marina de 5 millas en el sector oeste y de 3 millas en el resto de la Isla.

En este sentido, señala que la inclusión de la Isla "deviene de sus particulares rasgos geológicos y su patrimonio biológico".

Desarrollo sostenible

La isla de Fuerteventura está inmersa en un proceso de transición hacia una estrategia territorial de sostenibilidad, apostando por una oferta turística cualificada y diversificada, basada en el reconocimiento de la necesidad de preservación del medio ambiente y de la planificación integral del territorio, recuerdan desde el MARM.

Precisamente, el consejero de Medio Ambiente del Gobierno de Canarias, Domingo Berriel, dijo ayer que la declaración es "el resultado de la apuesta de los majoreros por el desarrollo sostenible".

Berriel manifestó que "esta calificación supone un mayor compromiso en el que todas las políticas de desarrollo e infraestructuras se tendrán que evaluar conforme a estrictos parámetros de conservación, que requieren una disciplina basada en el equilibrio".

La acreditación despeja el camino para impulsar la creación en la Isla de un parque nacional que comprenda las zonas áridas, un proyecto pionero cuya fase técnica está ya en marcha", anunció.