Rosendo Fragoso, vecino del municipio gomero de Agulo, ha denunciado el vertido de 1.600 metros cúbicos de escombros y la destrucción de más de 100 tabaibas en un terreno de su propiedad, situado en el lugar de especial protección paisajística conocida por "Gallegos".

Los hechos se remontan a 2005, cuando el vecino, natural de Agulo y residente en Las Palmas de Gran Canaria, denunció los vertidos y la ampliación de un tramo del camino público de acceso a su finca.

Según explicó Rosendo Fragoso a la Agencia Efe, desde el primer momento sospechó que los escombros procedían de las obras "ilegales" de construcción de la vía de acceso a la vivienda de una vecina, a quien denunció ante el Juzgado.

Rosendo Fragoso informó de los hechos al alcalde del municipio, Néstor López, y solicitó inspección de la Agencia de Protección del Medio Ambiente y Natural.

En su contestación, la agencia aludió a un escrito del Ayuntamiento de Agulo sobre la dificultad de la identificación de los responsables de los vertidos, al ser libre el camino público de acceso a su finca a personas y vehículos.

Fragoso recuerda que en 2007 escribió una carta al alcalde, en la que solicitaba un certificado sobre el origen de los escombros y "me contestó con un informe ridículo que no se ajustaba a la realidad", comenta.

"Me dijo que el camino hacía más de 10 años que no había sufrido alteraciones y que no sabia ni la fecha ni la procedencia de los escombros, algo que no es verdad", indica.

Rosendo Fragoso perdió el juicio y fue condenado a pagar las costas, lo que se suma a los más de 8.000 euros de gastos en abogados y procurador.

"El juicio estaba amañado desde el principio, ya que de los tres testigos me quitaron el más importante y a los otros dos ni siquiera los hicieron pasar a la sala de audiencias", señala.

Añade que, además, el dueño de la constructora encargada de las obras de la pista de la vecina es primo hermano del procurador que por sugerencia de su abogado contrató.

Advierte de que ahora va a luchar con todas sus fuerzas, porque considera que el lugar no puede quedar "con palmeras con la tierra hasta el cogollo" y que alguien tendrá que replantar las más de 100 tabaibas sacrificadas, "un árbol súper protegido".

Rosendo Fragoso asegura que tiene fotos aéreas desde 2000 hasta 2005 y una decena de testigos que no pudieron atestiguar, que acreditan el "atentado contra el medio ambiente".

Adelanta que trabaja para que La Gomera no sea declarada Reserva de la Biosfera, para lo que se ha puesto en contacto con la Convención Internacional del Paisaje, con los representantes de UNESCO en España y con el director general de Desarrollo Sostenible del Medio Rural, Jesús Casas.

Rosendo Fragoso quiere que el Ayuntamiento cierre el camino a 2,5 metros, tal y como estaba antes, y que le devuelvan los 180 metros cuadrados que "me robaron de mi parcela".

El camino es propiedad del Ayuntamiento y por tanto es el responsable de dejarlo como estaba, dice Fragoso, quien pide la dimisión de Néstor López por ser el máximo responsable de "esta atrocidad al paisaje y al medio ambiente de La Gomera".