Frank Casañas, quinto en los Juegos Olímpicos de Pekín, no superó, un año después, la ronda de calificación de disco al ejecutar un solo lanzamiento válido, de 61,10 metros, insuficiente para estar entre los doce mejores.

Casañas, que en su último tiro de calentamiento había alcanzado la marca de calificación, empezó, sin embargo, con dos nulos y tuvo que jugárselo todo en el tercer intento.

Antes, en el grupo A, el plusmarquista español, Mario Pestano, se había clasificado con su primer tiro, de 65,03 metros. La marca requerida para entrar en la final era de 64,50 metros, por lo que el lanzador canario no necesitó hacer ninguno más.

Este miércoles, a partir de las 20.10 horas, Pestano está en la lucha por las medallas.