El capitán del Barcelona, Carles Puyol, aseguró ayer que su entrenador, Pep Guardiola, no tuvo ninguna responsabilidad en la eliminación de la Copa ante el Sevilla y destacó que el equipo peleó por el partido en todo momento.

Aunque Guardiola asumió tras el encuentro del Sánchez Pizjuán toda la culpa de la eliminación, transmitiendo incluso la sensación de que había fallado a los jugadores, Puyol defendió la labor del técnico. "No nos ha fallado. Preparó bien el partido, como siempre, pero los que ganan o pierden somos los jugadores", dijo.

Puyol, que insistió en que el vestuario está "encantado" con Guardiola, afirmó también que su equipo "mereció más" en Sevilla, en un partido en el que "nadie nos puede reprochar nada porque salimos a por todas, demostrando que queríamos seguir adelante".

Resignado a firmar una derrota "al menos digna", el capitán admitió que al equipo "aún le dura el cabreo", pero reconoció que no jugar la Copa servirá para "descansar un poco".