El Real Madrid será el equipo que más aficionados traslade esta temporada el Rodríguez López. Cerca de 800 seguidores blancos estarán en las gradas del estadio. Ninguno de ellos pertenece a alguno de los grupos ultra que siguen al equipo. De ellos 678 ocuparán el sector R de San Sebastián Alta; el resto, considerados VIP -se trata de familiares y amigos de miembros del club y de la plantilla- se sentarán en Tribuna Baja.

Los datos se revelaron ayer en la reunión preparatoria del dispositivo de seguridad que se pondrá en práctica para garantizar que el espectáculo se desarrolle sin contratiempos. José Antonio Batista, subdelegado del gobierno en la provincia, presidió el encuentro, al que asistieron representantes de las policías locales de Santa Cruz y La Laguna, Guardia Civil, Cuerpo Nacional de Policía, Cruz Roja, además de una representación del CD Tenerife. Según contó Batista, han sido los servicios de seguridad del Real Madrid los que han descartado que esos seguidores madridistas que asistirán al partido sean potencialmente peligrosos: "Siempre más número es aumentar las posibilidades de riesgo, pero la mayoría de las entradas han ido destinadas a Peñas del Real Madrid en el Archipiélago y las que tienen controladas de venta individual ninguna pertenece a grupo alguno preocupante", destacó Ignacio Abad, el secretario general del Tenerife.

Teniendo esto en cuenta, las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado no prevén "ningún tipo de riesgo en el interior del campo una vez se esté desarrollando el partido", puntualizó el subdelegado. Así que el operativo que encabezará la UIP será el habitual para un partido de masiva asistencia, con presencia de un grupo importante de aficionados rivales. Así se reforzarán los accesos a la zona de la grada en la que irá el grueso de ese grupo (San Sebastián Alta), que estarán distanciados de la hinchada blanquiazul por un cordón policial y tendrán acceso a aseos y cantina propia. El dispositivo de seguridad, por tanto, se va a reforzar para evitar contratiempos en los desplazamientos que el Real Madrid haga cuando aterrice en la Isla. Será similar al que se puso en marcha la segunda semana de enero con la visita del Barça. Aunque habrá algunas diferencias. La principal es que el conjunto catalán eligió un hotel más accesible para concentrarse y la segunda es que desplazó casi la mitad menos de aficionados (375).