El Tenerife luchará esta tarde más consigo mismo que contra el Real Madrid. "No hay miedo, hay respeto. Si me preocupo sólo por Cristiano, te la liarán Kaká, Granero, Xabi, Higuaín, Sergio Ramos... el que sea. Me preocupa el bloque. Pero más que el Madrid, me ocupo de mi equipo. Quiero que seamos descarados, valientes y no hablo sólo del aspecto ofensivo, también me refiero al defensivo", afirmó ayer José Luis Oltra en la rueda de prensa previa al partido de esta tarde. Según contó, a nadie en el vestuario le gustó la manera de perder contra el Athletic el pasado domingo. La confesión revelaba la principal preocupación del técnico: "En la charla he hecho hincapié en que el equipo tiene que competir desde el minuto uno al 90", destacó. Oltra reconocía que en las últimas jornadas el Tenerife ha tenido problemas para reponerse cuando ha encajado algún tanto. En Zaragoza "te marcan un gol y el equipo se cae" y en Pamplona "bajó los brazos" ante el mismo contratiempo. "Son temas individuales, de carácter, que dependen de cada futbolista, pero les he intentado explicar que no nos debe suceder. Hay aspectos que no nos pueden faltar nunca, agresividad, carácter, ...", comentó. En el fondo de su discurso, el valenciano venía a admitir que el Tenerife estaba olvidando una de sus principales virtudes: la fuerza mental. "Negar una evidencia es de necios", afirmó. "Puedes tener un mal día, no tener acierto o fluidez, pero las otras cosas, da igual el resultado o si ha pasado alguna cosa, no nos pueden faltar y vamos a intentar que esto se corte. Hay que tratar de subsanarlo. Y sé que el máximo responsable soy yo, igual que el culpable de que esto haya sido así", agregó.

Teniendo en cuenta todo lo anterior, la principal consigna que ha insistió en dar a sus futbolistas es que esta tarde compitan, "intentando ofrecer las mejores sensaciones". "Tenemos que dejarnos el alma en el campo", destacó. Para conseguir que los suyos cumplan con la exigencia, los mensajes que ha lanzado esta semana al vestuario han ido encaminados "a que el nivel de activación sea el correcto". Es decir, que "no nos pasemos de revoluciones ni nos quedemos cortos", pero tampoco que "nos fijemos tanto en el rival, que sí hay que hay que tener muy presente", pero que no debe "no nos imponernos por el nombre". Oltra está convencido de que el Tenerife no tiene que imitar a ninguno de los equipos que han logrado superar al Real Madrid este curso. Considera que con su estilo tiene posibilidades de dar la sorpresa a todo un conjunto, que "claramente ha ido a más tras pasar por el período de adaptación" que necesitaba tras los grandes cambios que hizo durante el verano, empezando por el banquillo, pero que, por otro lado, "ha demostrado que no es invencible". "Vamos a intentar aprovechar nuestras opciones sean muchas o pocas y apurarlas hasta el final". El valenciano está convencido de que sumar los tres puntos en juego esta tarde no sólo devolvería a su equipo parte del crédito clasificatorio que ha perdido en las últimas jornadas, sino que serviría "de gran refuerzo anímico". Pero ello, insistió, no se consigue a través de "un golpe de suerte, sino porque se busca y nosotros tenemos que hacer las cosas a un grandísimo nivel para intentar doblegar al rival". El valenciano no quiso ahondar en las virtudes del equipo de Pellegrini. Se limitó a destacar que "anda en un buen momento". "Defensivamente está mucho más sólido" que en los primeros meses de competición y lo demuestra el hecho de que ha dejado su portería a cero en once de los 23 partidos de Liga que ha disputado: "También es el segundo equipo menos goleado y el más goleador", añadió.

José Luis no olvidó su habitual referencia al papel de la afición. Pidió que "tenga fe, se convenza de que podemos y nos ayude hasta el final" del partido. "Luego es soberana y puede hacer lo que crea oportuno", apuntó. No se atrevía el entrenador a dar más indicaciones: "Ya han vivido muchos partidos de este nivel, con lo cual tal vez los consejos me los tendrían que dar ellos a mí. Además ya tuvo un comportamiento ejemplar con el Barcelona y poco más se le puede pedir".

Cuando el Tenerife le ganó la primera Liga al Real Madrid (91/92), José Luis Oltra jugaba en el Sabadell. Un curso más tarde, en el segundo triunfo consecutivo del equipo isleño en el Heliodoro (92/93), jugaba en un equipo de la Tercera valenciana. El entrenador recuerda que "fueron dos derrotas muy significativas". Además confesó que conoce muchos detalles porque Toño Hernández, su segundo, le ha contado múltiples anécdotas de aquellos partidos. Lo que no entiende es que se siga diciendo que Tenerife es una Isla Maldita para el Real Madrid. Por un lado porque "ha ganado más veces de las que ha perdido" y por otro "porque aquí se le trata muy bien".