TENERIFE b 0

at. madrid B 2

CD Tenerife BToño Ramírez; Natael, Rayco, Moreno, Jesús; Julio de Dios, Roque (Alexis de Paz, m. 60); Óscar (Josmar Zambrano, m. 54), Juan Ramón; Rubén Rosquete (Jonay, m. 46) y Airam.

At. Madrid BJoel; Sergio, Regalón (Atienza, m. 14), Martín, Jaime; Rubén Pérez, Indiano, Molina (Campillo, m. 87); Perea, Borja y Cedric (Koke, m. 78).

ÁrbitroJosé Luis Corral García, del Colegio Gallego. Amonestó a los blanquiazules Rayco y Natael y al visitante Rubén Pérez.

Goles0-1, m. 50: Avance en ataque del lateral diestro Sergio por su banda, con centro final al área para que Borja marque de cabeza.

0-2, m. 88: En un contragolpe rojiblanco, Borja hace perder la posición al portero Toño Ramírez, que lo persigue, y centra el balón a Koke para que marque a puerta vacía.

IncidenciasAlrededor de 400 espectadores en el Centro Insular de Atletismo de Tenerife, en Tíncer. Entre ellos el entrenador del primer equipo del CD Tenerife, José Luis Oltra, y el jugador de la primera plantilla Aitor Núñez.

La plantilla del Tenerife B tiene razones para deprimirse. No consigue puntos, pero tampoco hace mucho para lograrlos. Ayer, con el miedo en el cuerpo, espeso y sin fútbol, avivó la ilusión del segundo equipo del Atlético de Madrid, mucho más ambiciosa: jugar las eliminatorias por el ascenso. Un error defensivo de los locales con consecuencias fatales y un contragolpe visitante, marca de la casa, fueron dos goles, dos golpes, que elevan a cuatro el número de jornadas consecutivas en las que el cuadro blanquiazul pierde y a seis en las que no gana. Demasiado tiempo para un conjunto que hace un mes vivía más tranquilo y que ahora le toca sufrir en el infierno.

Una película entre los mayores de estos dos clubes, en Primera, atrae, pero lo que protagonizaron ayer los filiales resultó un cortometraje de lo más flojo. Aunque durase 90 minutos el fútbol apareció mucho menos tiempo y eso que los actores son aspirantes a profesionales bien remunerados.

Pero a estas alturas de la Liga, con el tiempo encima, la consecución de los objetivos marca el diseño de actuación. El Tenerife B, con la defensa restaurada por las numerosas bajas, y el Atlético B salieron al césped con mucho respeto y con la idea de cometer los mínimos errores. El juego, imposibilitado además por el viento -en contra de los locales en el primer período-, se limitaba a mantener las posiciones e impedir que el contrario se acercase con frecuencia a las áreas propias.

El Tenerife B sólo dispuso en este tiempo de tres ocasiones, por definir de alguna manera una falta bien ensayada por Julio de Dios, pero mal ejecutada por Airam (m. 8), o una contra que Roque acabó de la peor manera (m. 25). El cabezazo de Natael, con toda el alma, tras un córner (m. 22) sí fue algo más diáfano.

El cuadro visitante también buscó sus maneras de variar el marcador. Borja -un internacional español sub''17 con una complexión de adulto- lo intentó de cabeza (m. 15). Perea, en una falta esquinada (m. 20) y, sobre todo, cuando en el 26 encaró a Toño (m. 26), pero Natael se cruzó bien para tapar al zurdo de los madrileños.

La segunda parte de esta historia dejó una sensación de ya vivida y se cuenta rápido. Perea (m. 48) y Molino (m. 49) avisaron antes de que un error defensivo propiciara que Borja emulara a los grandes rematadores e hiciera el primer gol del Atlético B.

La reacción de Alfredo Merino, que ya había dado entrada a Jonay Díaz -en el fondo tan habilidoso como "tragón"- no se hizo esperar. Josmar y Alexis de Paz, dos "jugones", se metieron en la película. El CD Tenerife B buscaba los apoyos cortos o el virtuosismo, pero no le salió nada. Un chut lejano de Julio de Dios (m. 52), otro del niño venezolano (m. 60) y una falta "made in Alexis" (m. 73) fueron sus mejores intentos por igualar el marcador. Todos vanos, faltos de puntería.

Mientras el conjunto local se iba descomponiendo, el Atlético de Madrid B jugaba como le gusta. Veloz, a la contra, inquietando a los insulares, que acabaron con el defensa central Moreno en posiciones de delantero centro.

Los intentos desesperados del CD Tenerife B no sólo no encontraron una respuesta positiva sino que a dos minutos del final de este mal partido Koke hizo cantar a sus compañeros con un segundo gol.

A cuatro jornadas para el final de la Liga, el segundo equipo blanquiazul ha perdido el fútbol.