Alrededor de dos mil personas, según los convocantes, se han manifestado hoy en Palma en protesta por la exclusión del Mallorca de la Liga Europa, anunciada la semana pasada por la UEFA debido a los problemas económicos de la entidad balear.

Los manifestantes, convocados a través de las redes sociales de internet, se concentraron ante la sede de la Federación Balear de Fútbol, corearon diversos cánticos en contra de la UEFA, su presidente, Michel Platini, el Villarreal (que sustituirá al Mallorca en la Europa Liga), y exhibieron pancartas con el lema "UEFA, fair play please" (UEFA, juego limpio por favor).

Detrás de la pancarta principal desfilaron, entre otros, la ex alcaldesa de Palma Catalina Cirer; el delegado de la Presidencia para el Deporte, Diego González; el portavoz del Bloc, Biel Barceló; el vicepresidente segundo del Mallorca, Jaume Cladera, y el presidente de la Federación de Peñas del Mallorca, Xisco Bauzá.

La iniciativa popular, promovida también por la Federación de Peñas del Mallorca, ha contado con el apoyo de diversas asociaciones locales, mientras que el Parlament balear aprobó esta mañana una declaración institucional contra la exclusión del club de la segunda competición de fútbol de Europa.

La manifestación, seguida por cientos de aficionados luciendo los colores rojos del equipo, con silbatos y bombos, y siempre escoltados por fuerzas policiales, ha pretendido "mostrar el rechazo de la afición a la injusticia cometida", según los convocantes.

Al finalizar la concentración, los organizadores han entregado al al presidente de la Federación Balear, Miquel Bestard, un manifiesto redactado por dirigentes de la agrupación de peñas.

Bauzá, que entregó el comunicado, ha indicado que la intención de los aficionados es "hacer ver" al presidente de la Federación Española de Fútbol, Ángel María Villar, "el error que ha cometido al permitir la exclusión del Mallorca, porque ha creado un peligroso precedente, por el cual, cualquier club podrá reclamar en los despachos algo que no ha ganado en el terreno de juego", afirmó, en medio de una gran ovación de los allí congregados.

El Mallorca fue vetado por la UEFA tras presentar un concurso voluntario de acreedores, la antigua suspensión de pagos, el pasado mes de mayo, acuciado por una deuda de entre 60 y 70 millones de euros que reclaman unos 300 acreedores.

El equipo balear ocupó la quinta plaza en la pasada Liga y hasta el final peleó por un puesto en la Liga de Campeones.

Sus nuevos propietarios, encabezados por Lorenzo Serra Ferrer, han garantizado la viabilidad económica de la entidad, sustentada en una drástica política de austeridad y un cambio de rumbo en la planificación deportiva.

El técnico danés Michael Laudrup ha sustituido a Gregorio Manzano en el banquillo y se ha implicado en el "nuevo" Mallorca la familia del tenista Rafael Nadal, nuevos accionistas del club.