El keniano David Lekuta Rudisha volvió a batir, una semana después, el récord mundial de 800 metros para dejarlo en 1:41.01 en la reunión de Rieti, que terminó con la victoria del etíope Tariku Bekele en 3.000 metros con la mejor marca mundial del año (7:28.70).

Una semana después de arrebatar en Berlín al danés Wilson Kipketer el récord de las dos vueltas a la pista con un tiempo de 1:41.09, Rudisha cumplió su compromiso de intentar rebajarlo en Rieti y lo consiguió en una carrera excepcional.

En siete días, el récord mundial que durante trece años estuvo en poder de Kipketer ha caído dos veces. Las dos por medio de Rudisha, de sólo 21 años, que en la reciente reunión de Bruselas, en la que se limitó a vencer, considera a su alcance una marca de 1:40.

Sammy Tangui, en labores de liebre, pasó los 400 metros en 48.20 y, como en Berlín, Rudisha se quedó solo al frente de la carrera para recorrer la última vuelta. Su compatriota Lalang llegó segundo en 1:42.95 y el estadounidense Symmonds fue tercero con 1:43.76.