rosenborg 1

atlético 2

RosenborgOrlund; Lustig, Bjarsmyr, Demidov, Dorsin; Henriksen, Annan (Sare, 61''), Skjelbred; Moldskred, Iversen y Prica.

AtléticoDe Gea; Ujfalusi, Perea, Domínguez, Antonio López; Raúl García, Assuncao (Mario Suárez, 70''), Tiago, Simao; Diego Costa (Camacho, 90'') y Kun Agüero (Forlán, 61'').

ÁrbitroVladislav Bezborodov (Rusia). Amonestó al local Moldskred y a los visitantes Agüero y De Gea.

Goles0-1, m. 4: Agüero.

1-1, m. 52: Henriksen.

1-2, m. 83: Tiago.

IncidenciasEstadio Lerkendal de la ciudad noruega de Trondheim. Unos 15.000 espectadores.

El Atlético de Madrid multiplicó ayer sus opciones de clasificación en el grupo B de la Liga Europa con un triunfo en el campo del Rosenborg, al que superó con un sufrimiento inesperado, sobre todo en la segunda parte, gracias a un golazo del portugués Tiago Mendes y a las paradas del portero David de Gea.

No hizo un partido nada brillante el equipo rojiblanco, incluso estuvo contra las cuerdas durante un tramo de la segunda mitad, pero salió del estadio Lerkendal de Trondheim, un campo inaccesible esta temporada, en el que los locales no habían perdido ninguno de sus 19 encuentros anteriores de este curso, con una victoria fundamental.

El actual campeón de la Liga Europa ya tiene el billete para los dieciseisavos de final del torneo a solo un paso, ya que un triunfo en la próxima jornada ante el Aris de Salónica, en el Vicente Calderón, sería definitivo para su presencia en la siguiente ronda de la competición, tras sumar los tres puntos en Trondheim.

Allí, el Atlético completó una primera parte aceptable, pero protagonizó un segundo tiempo decepcionante, en el que dio vida al Rosenborg, al que le bastó con su ímpetu y unos cuantos balones colgados al área para crear el caos en el equipo madrileño, dominador más o menos cómodo del choque hasta la reanudación.

También había mandado hasta ese momento en el marcador, desde el minuto 4, cuando firmó el 0-1, en una jugada iniciada con un excelente cambio de juego de Raúl García, continuada con un preciso control del portugués Simao Sabrosa y culminada, sin oposición en el borde del área pequeña, por el argentino Sergio Kun Agüero.