Marc Bertrán es el reflejo de un equipo que, después de una semana de obligado parón, tiene "muchas ganas de volver a jugar". El capitán hubiera preferido "jugar contra el Granada después de dos victorias seguidas", pero tampoco pierde el tiempo lamentándose por lo que no pudo ser. De hecho, añade su siempre optimista visión de cualquier situación. "Fue una pena, pero nos ha dado más tiempo de pensar en este partido y de estudiar más al Recreativo. Ahora estamos bien preparados para competir", indica.

Tampoco se ha resistido el futbolista ilerdense a la recurrente comparación de las trayectorias de ambas escuadras. "Hemos estado en dinámicas parecidas desde el inicio. Ellos empezaron muy mal y ahora están en fase ascendente. Igual que nosotros. Será un partido muy importante para los dos. Nos jugamos mucho y espero un partido muy duro", advierte.

Una victoria en el Nuevo Colombino catapultaría a los de Mandía hacia posiciones más desahogadas. "Sería muy bueno ganar porque es un partido de nuestra Liga, aunque sabemos que las cosas pueden cambiar al final de la temporada", explica Bertrán antes de desvelar la fórmula que utilizarán para asaltar el feudo onubense: "Nos lo tomaremos como el partido más importante hasta ahora y saldremos a por todas".

Quedan dos partidos para acabar el año y el Tenerife pretende iniciar el 2011 fuera de los puestos de descenso. "Ojalá. Si conseguimos los tres puntos podremos salir de abajo y veremos el futuro con optimismo. Lo ideal sería irnos de vacaciones fuera del descenso y, aunque con el partido aplazado será más difícil, la ambición del equipo es la misma y el objetivo es salir cuanto antes".

Por eso, no hay lugar para las concesiones. Ni siquiera ante el reencuentro con su ex compañero Manolo Martínez, "que dejó huella en el Tenerife y al que le tenemos bastante cariño los que estamos aquí. Le deseamos suerte, pero no contra nosotros", asegura Marc.