Miguel Concepción dio ayer el visto bueno al cuarto despido de un entrenador desde que accedió a la presidencia del Tenerife, en el mes de febrero de 2006. Antes que la de Mandía, el dirigente había aprobado las destituciones de David Amaral, Krauss y, más recientemente, Gonzalo Arconada.

No obstante, estos no son los únicos técnicos que han trabajado en el club blanquiazul durante el período de mandato del empresario palmero, que sustituyó a Víctor Pérez de Ascanio en el momento en el que David Amaral estaba al frente de la plantilla. Pocas semanas después, optó, a petición del ex director deportivo Alfonso Serrano, sustituirlo por Krauss, que finalizó la campaña evitando el descenso del equipo a Segunda B.

El alemán inició el siguiente curso, pero no lo terminó, dado que la mala trayectoria del representativo aconsejó su cese. El elegido fue Casuco, que tampoco llegó a la última jornada. En su caso, no hizo falta que los dirigentes rescindieran su contrato, ya que el propio preparador murciano fue quien quiso dimitir, dando paso al banquillo a un técnico de la casa, Toño, que guió al equipo en los dos partidos finales.

A partir de ahí comenzó una fase mucho más estable, la que tuvo a José Luis Oltra durante tres campañas consecutivas como entrenador del conjunto tinerfeño.

Lo que vino después, en junio de 2010, es el resultado de la actual crisis del equipo: la elección de Arconada, que fue despedido tras la cuarta jornada de Liga sin que el Tenerife hubiera sumado, y el intento de reacción encomendado a Mandía. En medio del vasco y el gallego cogió las riendas del Tenerife el preparador del filial, Alfredo Merino, coincidiendo con la visita de los insulares a Jerez.

Ahora arranca otra etapa, la del séptimo "míster" de Concepción.