Tapia considera que el espectáculo no estará reñido con la necesidad del Tenerife de sumar los tres puntos ante el Barcelona B. "Será un partido bonito y con goles", avisa el técnico, quien aconseja evitar la euforia "cuando el equipo saque la cabeza y no caer en el derrotismo si los resultados no son positivos".

¿Fue un golpe duro regresar a las cuatro últimas posiciones?

Me hubiese gustado continuar fuera de esos puestos, pero también sabemos que lo más importante es nuestro nivel de juego. Tenemos que madurar y dar ese pasito que quizás nos faltó en las dos últimas salidas para que el equipo se consolide en una zona tranquila de la clasificación. Es cierto que perdimos en Cartagena, pero me centro especialmente en saber los motivos y qué tenemos que hacer para que no se repita, entendiendo que en lo que resta de Liga tendremos derrotas y victorias. Lo que hay que hacer es procurar no caer en la euforia cuando el equipo saque la cabeza ni en el derrotismo si los resultados no son tan positivos.

¿Cómo están los ánimos?

Bien. La verdad es que el equipo ha entrenado con normalidad y con mucha ilusión después de no haber podido conseguir ningún punto en la última salida. Además, es consciente de lo que nos estamos jugando en cada partido y está convencido de que vamos a dar la cara y que con el apoyo de la afición haremos un buen encuentro.

¿La permanencia pasa por los resultados en el Heliodoro?

En casa hay que sacar los partidos adelante y ganarlos, aunque sabemos que aquí perderemos puntos porque es muy difícil hacer pleno. Somos conscientes que debemos sumar unos mínimos y que tenemos que conseguirlo haciéndonos muy fuertes en casa y luego sacando lo máximo posible fuera.

¿Cómo lleva lo de haber encajado goles en todas las jornadas?

Somos un equipo con características ofensivas y sabemos cuáles son nuestros puntos fuertes y débiles, pero de vez en cuando queremos dejar la puerta a cero, sin obsesionarnos, sin que eso nos bloquee en ataque o provoque una situación negativa en relación al juego ofensivo. Eso es importante. No se trata de dejar la portería a cero y perder nuestras virtudes.

En Cartagena faltó acierto en ataque. ¿Cambiará algo este lunes para corregir este factor?

No, porque lo de Cartagena fue cuestión de acierto, de suerte. En los últimos siete partidos hemos dejado de marcar dos veces y sabemos que no siempre vamos a anotar. Incluso en Cartagena generamos más ocasiones que en otros encuentros y no tuvimos la suerte de materializarlas. Esto es fútbol y así sucede. Lo que no debemos hacer es obsesionarnos con ningún aspecto del juego, sino normalizar la situación y pensar que habrá partidos en los que marcaremos y otros en los que no, y a la inversa.

¿Cree que el equipo tiene problemas en su juego ofensivo? Siendo el segundo máximo goleador, un defensa, Pablo Sicilia...

Pero el promedio desde que estoy en el club es de dos tantos por partido. El balance es muy bueno y esperanzador si seguimos con él y logramos reducir las ocasiones y los goles que estamos recibimos.

¿Sospecha que el partido con el Barcelona B será de goles?

Creo que sí, que habrá goles y un bonito espectáculo, porque el Barcelona B y su primer equipo tienen el mismo estilo: juegan y también dejan jugar. Por eso espero un encuentro abierto y emocionante.

¿Qué opina del adversario?

Es un filial que está compitiendo muy bien en Segunda División y cuyos jugadores tienen expectativas muy reales de subir al primer equipo, y eso motiva muchísimo. Está demostrando ser un conjunto muy competitivo y se ha adaptado bien a una categoría complicada.

¿El Tenerife tendrá ventaja por la inexperiencia del Barça B?

En teoría, porque ellos están de-mostrando ser un equipo maduro. Lo de la experiencia no garantiza niveles de madurez o competitividad. Se encuentran entre los seis primeros clasificados y los últimos partidos los han disputado con una solvencia en ataque espectacular, porque han goleado. Lo que sí tenemos que hacer es explotar nuestras virtudes y tratar de que no aparezcan los errores.