La presencia del pívot Ricardo Guillén en el partido del viernes en el Pabellón de Melilla sigue siendo una incógnita. El jugador acudirá en la mañana de hoy a la Clínica Parque, donde será sometido a una ecografía de control, con el fin de saber cómo ha evolucionado la rotura fibrilar después del paro competitivo y de trabajar aspectos específicos bajo las órdenes del preparador físico y del cuidado del doctor Rodríguez-Jaubert.

"Estoy haciendo piscina por las mañanas con el fin de seguir trabajando el aspecto físico y mañana (por hoy) veremos lo que sale de la ecografía", indicó Richi Guillén a la conclusión de la sesión de entrenamiento de ayer tarde.

Sobre si considera que podrá formar parte de la expedición a tierras melillenses, fue claro: "¡Qué va!, no sé nada; habrá que esperar a lo que dictamine el doctor", puntualizó el interior tinerfeño MVP de la Adecco-Oro.

Alejandro Martínez, Israel Martín y Óscar Díaz contaron en el entrenamiento vespertino con doce jugadores, los diez de la plantilla más Ormazábal y Romén.

Tras el trabajo físico, con los entretenidos y divertidos juegos que organiza el preparador físico, los jugadores participaron de los minipartidillos cuatro contra cuatro, haciendo hincapié Alejandro en movimientos que habrá que tener en cuenta para atacar y defender al Melilla Baloncesto.

Un rival este que se ejercitó ayer con normalidad en el Municipal Javier Imbroda. Gonzalo García de Vitoria viene contando con la totalidad de la plantilla, que realizó un trabajo físico a caballo entre en el gimnasio y la pista, lo que repetirá en el día de hoy.

En otro orden de cosas, el sudanés "Mac" Koshwall acudió al Santiago Martín para despedirse de quienes fueron sus compañeros, cuerpo técnico y directiva. El presidente quiso hacerse una foto a su lado a la vez que le dijo a "Mac" que "esta foto valdrá un dinero en unos años, porque tú vas a triunfar; te lo mereces".