El jugador uruguayo Nacho González lamentó no haber podido debutar todavía en competición oficial con la camiseta del Valencia, a pesar de haber fichado por el club de Mestalla hace tres años y de haber disputado el pasado verano el Mundial de Sudáfrica con la selección de su país.

"La verdad es que no se entiende mucho, pero me lo explico por las muchas lesiones que he sufrido. En estos tres años no he tenido suerte. En dos de ellos he tenido una lesión grave, primero en el tendón de Aquiles y este año en la rodilla", señaló a EFE el centrocampista uruguayo.

En la recta final de la presente campaña, Nacho González volvió a entrenarse con normalidad, totalmente recuperado de la rodilla y con esperanzas de que su físico no le juegue una mala pasada en su última campaña de contrato con el Valencia.

"La idea para la próxima temporada es tener continuidad, poder coger ritmo, estar bien físicamente y, lógicamente, jugar y disfrutar del juego, que es lo que quiero. Esperemos que las lesiones queden fuera", indicó González.

Respecto a su futuro de cara a la próxima campaña, el jugador sudamericano recordó que le queda un año más de contrato. "Veremos lo que pasa. Sé que no tengo fácil quedarme, pero estoy convencido de que si juego y agarro continuidad puedo hacerlo bien. Ese es mi deseo", indicó.

"Me encantaría seguir en el Valencia, pero sé que no es fácil porque vengo de lesiones y no se sabe qué va a pasar. Si tengo continuidad puedo hacerlo bien y defender bien a este club. Esa es mi idea pero después se verá", insistió el jugador.

González llegó al Valencia en agosto de 2008 procedente del Danubio uruguayo, tras haber jugado en calidad de cedido unos meses antes en el Mónaco, donde ya sufrió una lesión que le impidió mostrar la calidad que le llevó a ser nombrado mejor jugador del campeonato uruguayo en la campaña 2006-07.

"Lamentablemente he tenido muy mala suerte con las lesiones desde que llegue a Europa. Tan solo el año pasado, cuando estuve en Grecia, jugué. Por eso pude ir luego al Mundial", relató.

El futbolista uruguayo recordó que tras ser fichado por el Valencia fue cedido al Newcastle, donde dispuso de oportunidades hasta que las lesiones truncaron la temporada.

Tras regresar al Valencia, no disfrutó de minutos y en el mercado invernal fue nuevamente cedido, en esta ocasión al Levadiakos griego, donde sí que le respetaron las lesiones y se ganó ir al Mundial.

Pese a ello, el club valenciano prefirió volver a cederlo a inicios de la pasada campaña. Marchó al Levante, que acaba de ascender a Primera, lo que le permitió al menos continuar en la misma ciudad.

"Empecé el año con el Mundial que fue una experiencia inolvidable. Después llegó la cesión al Levante y cuando estaba contento porque jugaba, llegó la lesión en un partido ante el Real Madrid", señaló.

"Me rompí el ligamento cruzado anterior y necesité seis meses recuperación. El Levante me dio la baja y tuve que volver al Valencia", concluyó.