La selección española sub''21, que este sábado disputará la final del Europeo de Dinamarca contra Suiza, es el equipo del torneo que más posesión de balón ha tenido, el que más goles ha hecho y el que más asistencias ha dado.

España siempre ha monopolizado la pelota en sus partidos, acumulando un 65,5% de media, muy por delante de Suiza, la siguiente con un 57%.

El caso más extremo se dio en la semifinal contra Bielorrusia, en la que tuvo un 73%, mientras que contra la República Checa fue de un 66%; frente a Ucrania, un 64%; y frente a Inglaterra, en el primer partido, un 59%.

El conjunto de Luis Milla no sólo tiene el balón, sino que sabe qué hacer con él. Ningún equipo ha marcado tantos goles, nueve en cuatro partidos, lo que da una media de 2,25 por encuentro. Suiza, la segunda en esta clasificación, ha hecho siete, 1,75 de media.

España tiene al máximo goleador, Adrián López con cinco tantos -que es también el jugador al que más fueras de juego le han señalado, nueve-, seguido por el suizo Mehmedi, con tres goles.

Siete de esos nueve tantos vinieron de asistencias. Sólo el 3-0 de Mata contra Ucrania, de penalti, y el tercer gol frente a Bielorrusia, en jugada personal de Jeffrén, no llegaron como resultado de un pase de un compañero. Un dato que revela el gusto del equipo por el juego asociativo y su falta de egoísmo.

Mata es además el líder de las asistencias, con dos.

La selección española es también el equipo que más lanzamientos sin ir entre los tres palos ha hecho, con 30 (7,5 de media), y el segundo con más tiros a puerta, 19, 4,75 de media. Sólo Dinamarca la supera en ese apartado, con 26 en 3 partidos.

La falta de efectividad de los daneses, sólo marcaron tres tantos, explica en gran medida por qué el equipo anfitrión quedó eliminado en la fase de grupos.

España encabeza también otras estadísticas del torneo, como la del jugador que más faltas ha sufrido, Javi Martínez, con 17, las mismas que el suizo Xherdan Shaqiri.

Pero no es el equipo al que más han castigado los rivales. Ahí manda Suiza, con 93 faltas recibidas, lo que equivale a 23,25 por partido; mientras que España es segunda con 76, 19 de media.

El rival del equipo de Milla en la final domina también otro apartado estadístico, el del conjunto menos goleado. Suiza no ha recibido un solo gol en cuatro partidos, frente a los dos encajados por España.