El número quince del mundo, el español Nicolás Almagro, se clasificó para la tercera ronda del torneo de Wimbledon tras superar al estadounidense John Isner por 7-6(3), 7-6(5), 6-7(5) y 6-3, en dos horas y 36 minutos.

Su adversario le obligó a debatirse en tres desempates a vida o muerte para resolver la cita, que se prolongó hasta el cuarto set y tuvo que ser interrumpida en dos ocasiones a causa de la lluvia.

Curiosamente ambos se enfrentaron en la pista 18 del All England Club, provista de una placa conmemorativa por ser el escenario donde Isner protagonizó el año pasado junto al galo Nicolas Mahut el partido más largo de la historia del tenis (con once horas y cinco minutos).

Lejos de querer repetir esa popular hazaña con el estadounidense, Almagro trataba de salir ileso lo antes posible de su segunda ronda para llegar fresco a la cita con el vencedor del encuentro que disputan en estos momentos el ruso Mikhail Youzhni y el indio Somdev Devvarman. Isner no se lo permitió.

Muy animado por sus seguidores españoles con gritos de "Vamos, Nico", "Venga, que ésa es tuya", Almagro demostró ser el más sereno de los dos rivales, capacidad que le sirvió para sacar adelante dos desempates.

Sólo en una ocasión antes, Almagro había alcanzado la tercera ronda de este Grand Slam. Fue en 2009, cuando Robin Soderling se cruzó en su camino y le impidió llegar a octavos.

Después del mal recuerdo del año pasado, derrotado en primera ronda por Andreas Seppi, Almagro vuelve a tener ante sí la opción de superar su marca en este torneo.