El Tenerife no tensará la cuerda en la rescisión de los contratos que se están negociando hasta el punto de comprometer la presencia del equipo en Segunda División B. A pesar de que la próxima semana (el jueves 30) se pueden confirmar públicamente las denuncias que varios de los futbolistas implicados están gestionando ante AFE, el Tenerife mantiene su estrategia y está preparado para pagar los contratos a los futbolistas que se nieguen de manera inflexible a negociar rebajas.

El club ha propuesto a los jugadores hacer frente a las cantidades que se les adeudan correspondientes a la temporada recién finalizada a través de ingresos aplazados en tres pagos trimestrales. Lógicamente, los años de contrato que faltan por cumplir se da por hecho que no se abonarán, a cambio de que los jugadores queden libres del compromiso.

Son 10 implicados.- En los últimos días han ido pasando por las oficinas del Callejón del Combate futbolistas y representantes de la primera plantilla y de los filiales, pero no en todos los casos para rescindir. En realidad, de los 15 profesionales con contrato en vigor, la cifra de los que son invitados a marcharse el 30 de junio se reduce a 10. Los otros 5 tienen situaciones especiales. A saber: Omar saldrá de la primera plantilla, pero como cedido o traspasado con opción de recompra; Josmar Zambrano, igual, porque el club ya le ha dicho a su representante que le busque equipo. La razón, obviamente, es su alta ficha, que sufrirá un incremento de más del doble en la siguiente temporada. Ezequiel Luna entra en los planes deportivos, aunque él no ve claro seguir en Segunda B; Pablo Sicilia tendrá vigente su contrato hasta que se recupere y, por último, Ricardo ya se desvinculó. O sea, que faltan 10 casos por resolver, algunos muy complicados, porque los jugadores parecen molestos con la entidad por diversos motivos.

Tendrá que pagar.- Los jugadores más caros de la plantilla representan un problema. Empezando por Nino, que ha perdonado los tres años que tenía garantizados en su contrato, pero que quiere liquidar lo correspondiente a esta campaña. El club cambió su criterio y ha pedido renuncias sobre esta misma temporada. Por eso no se ha firmado aún su rescisión. Más complejo está siendo el acuerdo con Natalio y Julio Álvarez, dos de los jugadores peor valorados por el entorno del club, pero que tienen contratos muy altos hasta 2013. Es una posibilidad de que a alguno de ellos haya que pagarles el contrato. Entre los 10 aludidos, el jugador con un vínculo más largo es Juanlu, que habría negociado para seguir en el equipo si el club hubiese querido.

Otros jugadores, como Melli, Aitor, que está hablando con el Alcorcón, o Bellvís, que cobra mucho dinero incluso para lo que pagan otros de Segunda A, necesitan ganar tiempo para resolver su futuro. Antonio Hidalgo, Sergio Aragoneses o Beranger guardan silencio sobre sus planes inmediatos. Lo primero, cobrar.