El Náutico La Salle, de la categoría Infantil masculina, cerró esta semana una temporada inolvidable, después de proclamarse campeón de Tenerife y de Canarias y de alcanzar los cuartos de final del Campeonato de España, un resultado que ha dejado más que satisfecho al seno del conjunto nauta, fundamentalmente a su entrenador, Santi Romero.

"Estamos muy satisfechos con este resultado", comentaba el máximo responsable técnico de la escuadra tinerfeña, "porque hacía muchos años que un equipo del club no iba al Nacional de esta categoría, y además porque no sólo participamos sino porque también pudimos competir", añadió.

Cuestionado por si el equipo se había marcado la meta de alcanzar los cuartos de final, Romero reconoció que "el objetivo marcado era pasar a semifinales, pero sabíamos que era casi imposible porque todos los conjuntos ACB estaban por ahí. Creo que los cuartos de final es el justo premio a lo hecho este año".

El técnico nauta, asimismo, repasó la trayectoria de su equipo en el reciente Nacional de Lanzarote. "Todo se nos puso bastante difícil después de que Javi Ballester, uno de los jugadores más importantes del equipo, se lesionara el primer día. Sin embargo, sus compañeros le suplieron muy bien y pudimos competir ante grupos de la talla del Joventut, Unicaja o Real Madrid. Me voy contento por la competición hecha y por la convivencia".

Santi Romero, para concluir, quiso destacar el potencial de los rivales a los que les tocó medirse. "Los dos únicos equipos que nos ganaron fueron el Joventut, a la postre campeón; y el Real Madrid, tercer clasificado. Hemos practicado un muy buen baloncesto, pero desde mi punto de vista los grupos estaban confeccionados de forma injusta. En nuestro cuadro, sin ir más lejos, nos emparejamos con el segundo y tercero de Cataluña, sabedores del nivel que hay en esta liga, si bien parece que esto cambiará el próximo año", concluyó.