El punto sumado ayer ante el Tenerife fue recibido como si de una victoria se tratara por parte del entrenador de La Roda, pues su equipo lo consiguió ante un rival al que calificó durante la semana como el más potente de la categoría. Antonio Cabezuelo "Rojo" comentó, al término del partido de la novena jornada, que tanto él como sus futbolistas se habían quedado "más que satisfechos con el empate", y quiso destacar que sus jugadores "lo dieron todo" para evitar que el conjunto de Antonio Calderón se impusiera. En este sentido, el técnico recordó que "las limitaciones" del modesto club albaceteño hacen que el 0-0 tenga más valor.

Al ser cuestionado, en rueda de prensa, sobre la puesta en escena de La Roda, Cabezuelo explicó que nunca dejará de ser fiel a su estilo. "Nos movemos dentro de una propuesta determinada y no íbamos a cambiarla por tener enfrente a un equipo como el Tenerife", indicó "Rojo".

Por otra parte, opinó que el árbitro Enrique Sanchís Cambra no fue justo al no castigar al defensa blanquiazul Javier Tarantino con una segunda tarjeta amarilla. Según el entrenador de La Roda, el zaguero vasco "tuvo que ser expulsado por las faltas que cometió". En cualquier caso, Cabezuelo aseguró saber que un equipo pequeño como el suyo tiene que "estar acostumbrado" a no recibir favores de los colegiados. "Tenemos que hacer el doble de esfuerzo si queremos puntuar", manifestó.

A modo de balance de la trayectoria de La Roda, señaló, insistiendo en las limitaciones de la plantilla que dirige, que "estamos teniendo un buen comienzo de Liga, pero no podemos dejar de mirar hacia abajo, porque las ausencias por lesión nos pueden dar problemas. Tenemos los pies en el suelo y sabemos dónde estamos y cuál es nuestro objetivo".