Por primera vez desde que comenzó la Liga, la UD Vecindario vive fuera de las plazas de descenso, aunque aún el peligro le persigue. Le ha costado 14 jornadas salir, pero en la actual el representativo de Santa Lucía de Tirajana ve como en la clasificación existen cuatro equipos peores que él. José Juan Almeida, su entrenador desde hace siete semanas, cree que aún hay mucho trabajo por hacer, aunque ve una gran mejoría en los suyos. Además, se muestra feliz de trabajar con un grupo que tiene "una ilusión y ganas tremendas", aún con el hándicap de ser una de las plantillas que menos cobra, no solo en el grupo sino en la categoría.

"Hace un mes no teníamos las mismas perspectivas que ahora, pero nos queda todavía mucho trabajo por delante", asegura el responsable técnico de un equipo que desde la primera jornada liguera se ha movido en los puestos de descenso -incluso fue colista siete semanas- y que ahora ocupa la plaza de la eliminatoria por la permanencia (16ª posición).

"El equipo ha cambiado mucho, una barbaridad en estas semanas de trabajo. ¿En qué? Hemos mejorado, sobre todo, en mentalidad. Ahora aguantamos la exigencia del partido; antes nos veíamos perdiendo por 1-0 y agachábamos la cabeza. Ahora hemos ganado en que no bajamos los brazos", explica José Juan Almeida, que pone como ejemplo del cambio la derrota en el estadio Carlos Tartiere (3-0). "Estábamos haciendo en casa del Oviedo muy buen partido cuando nos metieron el primer gol. Y en siete minutos se nos fue todo e hicieron dos más", recuerda Almeida sobre aquel compromiso, que fue el último del que la UD Vecindario salió derrotada.

El entrenador grancanario ha tratado de inculcar a sus futbolistas una mentalidad positiva. "Ésa es la idea y debemos disfrutar de los partidos, que no se conviertan en un suplicio. Pese a que cobramos menos que nadie, nuestros jugadores deben saber que no somos inferiores a nadie", añade el técnico, que desvela que es un "gusto" trabajar con su actual plantilla, porque "tiene una ilusión y ganas tremendas".

Almeida se hizo cargo de la UD Vecindario tras la destitución de Tino Déniz en la sexta jornada, con el equipo situado en la última posición y con solo dos puntos. En los ocho encuentros bajo su dirección, la situación se ha revertido, sumando los blanquinegros la mitad de los 24 puntos en juego, en base a un balance de tres triunfos, tres empates y dos derrotas. En la actualidad lleva una racha positiva de cinco jornadas sin perder, en las que ha obtenido 11 del total de 12 puntos.

El triunfo sobre el Conquense del pasado domingo, el primero a domicilio de esta campaña, se fraguó, según reconoce Almeida, "con dos paradas buenísimas de David Álamo", el portero canterano que desde hace tres semanas ha relegado a la suplencia al también hecho en casa Santi Hidalgo.

"El Conquense, en los primeros minutos, tuvo dos buenas ocasiones para haberse puesto con un 2-0 de ventaja, pero David Álamo hizo dos paradas buenísimas. Luego nosotros fuimos a más y el rival a menos. El Conquense está demasiado nervioso y nosotros lo sabíamos y jugamos con eso", comenta el técnico.

La UD Vecindario recibirá este domingo, desde las 11:00 horas, al Albacete, en el encuentro de la 15ª jornada del Grupo I. Pero no será su único compromiso oficial de esta semana, ya que mañana, en la Ciudad Deportiva, rendirá visita al segundo equipo del Rayo Vallecano en el encuentro de ida de los dieciseisavos de final de la Copa Federación, que comenzará a las 15:45 horas (hora canaria).

La convocatoria del cuadro grancanario para esta cita estará formada por jugadores con poca participación en la Liga hasta el momento, acompañados con futbolistas del segundo equipo y del juvenil.