José Francisco Molina, presentado ayer como entrenador del Villarreal, aseguró que se encuentra "muy ilusionado con este nuevo proyecto", que califica de "gran oportunidad" para él. Molina, hasta ahora en el Villarreal B, fue escogido por el club para reemplazar a Juan Carlos Garrido, destituido tras el partido de Copa del Rey del miércoles, en el que el equipo castellonense perdió (0-2) ante el Mirandés de Segunda B.

"Siento el apoyo del club y eso es muy importante para mí. Trabajaremos a tope con la máxima humildad y a la vez con la máxima ambición, demostrando que somos un buen equipo. Estoy muy ilusionado con este nuevo proyecto y es una gran oportunidad para mí", dijo Molina en el acto de presentación como técnico.

El exportero reconoció que la situación del equipo es "complicada", pero cree que deben afrontarla "con el mayor optimismo".

"Estoy tranquilo y confiado en las posibilidades del equipo porque los jugadores ya han demostrado que tienen muchísima calidad. Intentaremos recuperar cuanto antes el buen juego y, sobre todo, los buenos resultados para estar todos más tranquilos", dijo, añadiendo que le "encantaría" clasificar al equipo para Europa.