La plantilla del Tenerife creció el miércoles con la incorporación, a prueba, de Antonio López Álvarez. Su nombre quizás dice poco a los aficionados del equipo blanquiazul, aunque, en realidad, se trata de un jugador con un amplio recorrido en el fútbol nacional. No en vano, en su currículum sobresalen los 78 partidos que disputó en Primera -en el equipo solo lo supera Sergio Aragoneses, con 87 en la máxima categoría- y 134 en Segunda A. Además, llegó a intervenir en cuatro encuentros correspondientes a la Copa de la UEFA, en la temporada 04-05, con el Sevilla, y figura en el plantel del mismo club que se proclamó campeón de la segunda competición continental en la campaña posterior, en este caso sin contar con minutos.
Son algunos apuntes de la trayectoria de un jugador que mañana sabrá si firma o no un contrato con el Tenerife. Al menos, el plazo que tiene para convencer al director deportivo Pedro Cordero finaliza en la víspera de la visita al Coruxo, una vez concluyan sus cinco prácticas con el uniforme blanquiazul.
En caso de ser aceptado como nuevo refuerzo, López, que en mayo cumplirá 32 años, ampliará la colección de clubes en los que ha militado. Y no son pocos. Empezó con 19 años en el Leganés, en Segunda A (1999/2000), y debutó en el curso siguiente en Primera en las filas del Valladolid. Después pasó por el Numancia, de nuevo Valladolid, Sevilla, Málaga, Castellón, Gimnástic y Albacete, su último destino antes de quedar en paro en el verano de 2011.
La descripción de Pepe Moré.- Probablemente el entrenador que mejor conoce a Antonio es un viejo conocido del tinerfeñismo, el catalán Pepe Moré. El que fuera técnico de la escuadra insular en la primera vuelta de la Liga 04/05 supervisó el trabajo del deportista madrileño en dos etapas, primero en el Valladolid y después en el Castellón. "En ambos casos ofreció un rendimiento muy alto", recuerda Moré, que define a Antonio como un futbolista "totalmente zurdo" que puede realizar las funciones "de interior o de extremo izquierdo". Asimismo apunta que, en el apartado ofensivo, se distingue por su golpeo en las faltas directas. "Lanza muy bien por encima de la barrera", asegura el expreparador del Tenerife. Igualmente pone de relieve la "habilidad, la técnica y el buen desplazamiento de balón" que atesora un jugador al que Moré nunca utilizó como mediocentro, demarcación en el que sí sería útil para el actual "míster" del representativo, Andrés García Tébar. De hecho, en las tres sesiones en las que ha actuado en la Isla ha sido probado en ese puesto. "Llegué a ponerlo de interior, pero no por el centro", aclara Moré refiriéndose al que podría ser "un fichaje interesante si alcanza pronto la condición física idónea".
Durante las once campañas seguidas que lleva en el fútbol profesional, López no solo aprendió de Pepe Moré. También tuvo co-mo jefes a técnicos del prestigio de Joaquín Caparrós o Juande Ramos.
Compañeros conocidos.- Al profundizar en el amplio recorrido profesional de Antonio surgen más datos llamativos, como su coincidencia con futbolistas que pasaron por el Tenerife. La lista reúne a jugadores como Culebras, Dani Kome, Álex Castro -en el Numancia-, Julio Iglesias, Luis García -Valladolid-, José Luis Martí, Gerardo Torrado, Luis Gil, David Prieto, Jesuli, Alejandro Alfaro, Manuel Blanco -Sevilla-, Antonio Hidalgo -Málaga-, Natalio -Castellón-, Pinilla, David Medina -Gimnástic- y Javi Tarantino, en el Albacete, donde fue entrenado por Antonio Calderón.
Pero hay más. López compartió vestuario con futbolistas internacionales, algunos de ellos campeones del mundo. Por ejemplo, con Caminero, Eusebio Sacristán, Salva Ballesta, Dani Alves, Julio Baptista, Darío Silva, Adriano, Kanouté, José Antonio Reyes, Sergio Ramos, Jesús Navas o Saviola, por citar a unos pocos.