Javier Hernández (CajaCanarias Banca Cívica, Cabildo de Tenerife, USP La Colina, Agua Sierra Cazorla y RCN de Tenerife) trabajará en la Isla hasta que viaje a Cádiz a finales de febrero para tomar parte en la Carnaval Race. En esta entrevista habla del gran objetivo de su vida deportiva, los Juegos Olímpicos de Londres, en los que está en condiciones de luchar por las medallas.

¿Qué balance hace de la 2011?

Fue un año duro por las lesiones, aunque aprendí muchas cosas. Nunca había tenido lesiones y hasta me costaba reconocerlo. Es difícil asumir que no puedes entrenar como te gusta. La primera mitad del año tuve problemas en el hombro. En el Mundial, justo una semana antes del inicio, sufrí un accidente doméstico que no me permitió llegar bien a esta cita. Lo bueno es que nos clasificamos para los Juegos pese a estar lesionado. Ese mérito no es solo de Javier Hernández, lo es de todo el equipo.

¿Qué preparación va a seguir?

Luego de un 2011 tan accidentando estoy con mucha rabia, con muchas ganas de trabajar y llegar a los Juegos con confianza. Para ello hemos trazado un plan muy ambicioso, buscando el pico de forma para la Olimpiada. Creo que vamos a llegar muy bien preparados. Los primeros meses del año trabajamos para tener una base física para evitar las lesiones y las molestias al competir. Enero fue de mucho gimnasio. En febrero empezamos con el barco.

¿Qué importancia tiene compartir entrenamientos con navegantes de su mismo nivel?

El objetivo de aquí a los Juegos es entrenar a máxima intensidad. Y es que ahí reside la diferencia entre ganar una medalla a no quedar bien. Hay que aprovechar cada jornada al máximo. Buscamos calidad e intensidad en las sesiones de preparación. Para eso necesitamos prepararnos con gente que quiera también colgarse una medalla.

¿Cuál es plan de regatas de aquí al mes de agosto?

Queremos competir una vez al mes a partir de febrero. Buscamos acumular muchas horas de competición y llegar rodados a Londres. Empezamos en la Carnaval Race de Cádiz. Iremos a Mallorca, al Princesa Sofía; a Francia, a Hyeres; y al Mundial que se celebrará en Alemania. En junio tomaremos parte en la Sail For Gold, que tendrá lugar en el campo de regatas donde dos meses más tarde se disputarán los Juegos. Y por último competiremos en el Campeonato de Europa en Francia, en julio. Todas las citas son de primer nivel.

¿Qué diferencias hay entre el Javier Hernández de Pekín 2008 y el de Londres 2012?

Soy mejor que hace cuatro años. En esta campaña olímpica he logrado cosas que no esperaba. Se puede decir que en 2009 y en 2010 no nos bajamos del podio. Eso en Láser lo ha logrado muy poca gente. He tenido grandes picos de forma. Yo me noto mejor cada año que pasa. Siempre buscas entrenar con más calidad, ser perfeccionista y metódico. Todo ello ayuda a crecer. Ahora tenemos un plan de trabajo físico y táctico muy desarrollado. Estoy con confianza".

La clase Láser resulta muy competida, hay una docena de regatistas que vienen repartiéndose los puestos más destacados. ¿Cómo se consigue marcar diferencia en estas circunstancias?

Hay que llegar bien preparado. No creo que a día de hoy exista un "laserista" mejor que yo. Si llegamos a los Juegos sin haber pasado por lesiones o enfermedades, estaremos con opciones de medalla. Luego toca navegar bien y estar centrado. Es clave tener velocidad y afrontar la competición en el pico alto de forma. Lo demás, sobre todo el estudio del campo de regatas, lo tienen todos los equipos muy trabajado.

En 2008 la Federación no confirmó el equipo olímpico hasta el Princesa Sofía, poco antes de Pekín. Ahora no ha sido así. Su plaza es ya segura, ¿no es cierto?

La selección está terminada. Ahora, que ya estoy digamos nominado, debo seguir compitiendo dignamente antes de los Juegos y no tener una lesión que me impida ir. Unos meses antes de los Juegos será cuando llegue la carta del Comité Olímpico Español comunicándome la convocatoria. Falta esa formalidad.

Según Xabi Fernández e Iker Jiménez a España se le exige una medalla y dos ya sería un éxito. ¿Qué se palpa en el equipo?

Los navegantes de todas las clases llegan muy bien preparados. Hay muchas opciones de medalla. Nos beneficia que Londres está más cerca que Pekín, podremos entrenar más en el campo de regatas. Soy optimista y pienso en más de dos medallas para el equipo.

¿Estará presionado el equipo?

En los Juegos siempre hay presión. Es una competición diferente al resto. Pero hay que saber manejarse en estas situaciones. Lo bonito de los Juegos es precisamente sentirse muy observado. Recuerdo que antes de empezar en China respiré hondo, muy hondo. Ahora ya tengo esa experiencia.

Compartió un homenaje del RCNT a sus regatistas olímpicos. ¿Qué experiencias le contaron? ¿Ha cambiado mucho la vela?

Antes había grandes navegantes. Tanto Pancho Acevedo como Carlos Santacreu eran muy buenos en el barco. Para Tenerife y para el Náutico es un orgullo que ellos hayan competido en los Juegos. Ahora todo es mucho más profesional. Hay que ponerse en manos de los mejores preparadores, medir las cargas de trabajo, etc, etc. Ahora todo resulta más complejo.

Ante los Juegos, ¿qué papel tiene un deportista como Javier Hernández de "gerente" de sí mismo? ¿Hasta qué punto la planificación descansa en sus gestiones y hasta qué punto le ayuda la Federación Española?

Tengo la suerte de haberme rodeado de un gran equipo. Airam Rodríguez es un magnífico entrenador, a lo que se unen preparador físico, médico, fisioterapeuta y psicólogo. Todos ellos aportan su granito de arena. Nadie puede ganar una medalla solo. Además, también está el apoyo de los tuyos, de mi novia y de la familia.

¿Tiene más presión Goodison por competir en casa y defender el oro de Pekín?

Podría ser, pero todos competiremos con presión. Todos llegaremos allí después de cuatro años aguardando la cita. Si hay algún regatista a seguir, ese soy yo.

¿Mira más allá de agosto? ¿Por dónde pasa su futuro?

Eso ya se verá. El 99.9 por 100 de mi mente está en Londres. Ya habrá tiempo para otros proyectos.