Si uno de los motivos más destacables del parque automovilístico insular es la poca variedad de prestigiosas marcas de "fotingos", esta circunstancia no es óbice para que contemos entre ellos con los mejores ejemplares que antaño circularon por el mundo. La lejanía del archipiélago, el elevado coste de ellos unidos a la precariedad económica de entonces, no pudo impedir que más de un ejemplar, poseedor en su historial de la más alta calidad, llevara en su frente las siglas de TE (Canarias) hasta 1926 y posteriormente las de GC y TF.
En el artículo de este semana de EL DÍA vamos a contar la historia de la "Avions-Voisin", una fábrica gala fundada por Gabriel Voisin (1880-1973) en 1919 y la cual estuvo en producción hasta 1939. En el transcurso de sus 20 años de fructífera producción fabricó bellos y espléndidos ejemplares. La actividad empresarial no sólo se centró en la de los "fotingos", ya que también abarcaba la fabricación de biplanos, planeadores e hidroaviones. Del mismo modo esta fábrica fue la poseedora de la patente del famoso "Biscuter" construido en nuestro país bajo licencia por la Cia. Autonacional, S.A., con sede en Barcelona.
Antes de entrar en materia sobre los "Voisin" chicharreros hay que decir que la Compañía "Avions-Voisin" construyó de todo tipo, como fueron ejemplares provistos de motores de 4, 6 y 12 cilindros, así como autos de carreras y de récords. Sin tener documentos que acrediten que los ejemplares existentes en nuestro parque hayan sido importados por el señor Luis Vandewalle y Fernández del Castillo (1890-1935), podemos decir con mucha seguridad que el autor fue él mismo, ya que por aquel entonces se encontraba instalado en París en la Plaza Desnovettes, nº 10 y desde allí le remitía a su hermano el señor Manuel Vandewalle Hardisson cualquier marca gala que estimara factible para su venta en nuestra isla. Uno de aquellos ejemplares al que le atribuimos la autoría del señor Vandewalle es la del solitario "Bellanger" TF-514, matriculado el día 12 de noviembre de 1921.
Después de este "Belanger" le toca la hora de los "Voisín" y así llegamos al 24 de abril de 1922 en que el primer ejemplar de esta prestigiosa marca hace su estreno en Tenerife tocándole las placas de TF-601, tratándose en esta ocasión de un ejemplar con motor de 4 cilindros en línea. Al año siguiente la "Casa Vandewalle" repite experiencia con un phaeton para 4 pasajeros con motor de 4 cilindros de 10 H.P. y rotulado con el serial nº 5684 al que se le señala con la matrícula de TF-1011 el día 13 de diciembre de 1923.
Para cerrar el círculo sobre la hipótesis de que el señor Vandewalle fue el autor de que los "Voisin" estuvieran entre nosotros, es la fotografía que ilustra el artículo de esta semana en la misma puede apreciarse al caballero Luis Vandewalle a los mandos de un espectacular "Avions-Voisin" en la confluencia de la calle General Antequera con Viera y Clavijo. Dicho ejemplar estaba carrozado enteramente en aluminio y su carrocería pulida, así que el color era pura "plata". Este ejemplar lo trajo con ocasión de una de sus visitas a la isla y por tanto portaba placas francesas de las que solo hemos podido identificar la finalización de las mismas que correspondían a las cifras de 97-15. Una vez finalizadas sus vacaciones emprendió el regreso con su "Voisin", ya que el rastro de este ejemplar se pierde aquí, siendo lo más probable que su vida activa haya acabado mal en Francia, lo mismo que le sucedió a los TF-601 y TF-1011.
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