El pivote español Carlos Prieto, actualmente en las filas del Bergischer alemán, jugará la próxima temporada, con opción de ampliar un año más su contrato, en el Copenhague danés.
"Se podría decir que son dos años, porque he firmado un uno más uno en el que ellos -el club- tiene la posibilidad de cortarme al acabar la primera temporada", explicó Prieto en declaraciones a EFE.
El extremeño, que se someterá esta mañana al preceptivo reconocimiento médico en la capital danesa, será presentado como nuevo jugador del Copenhague antes del inicio del encuentro de la Liga de Campeones, que medirá hoy (20:10) en el Parken Stadion al conjunto nórdico con el Barcelona.
"Estoy muy contento. Es un equipo que está haciendo las cosas muy bien, un equipo que se está reforzando muchísimo con la intención de pelear por todo y eso siempre motiva", comentó el internacional español.
Prieto, de 32 años, llegará al campeón danés, uno de los nuevos poderes emergentes del balonmano continental, para sustituir a René Toft Hansen, que recalará el próximo curso en el Kiel alemán, en un plantilla en la que también milita el lateral español Cristian Malmagro.
"He hablado ya varias veces con el entrenador, pero todavía no sé qué rol voy a tener en el equipo, no sé si va a ser más defensivo o si cuenta también conmigo para el ataque, aunque ya habrá tiempo en los próximos meses para hablar de ello", indicó el jugador.
El campeonato danés será la tercera liga extranjera en la que competirá el pivote español desde que abandonó en el verano de 2009 la ASOBAL, donde militó, entre otros, en el Barcelona, el Ciudad Real o el Valladolid, con destino al Rhein-Neckar Lowen alemán.
Prieto, medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Pekín, abandonó ese club tan sólo un año más tarde para fichar por el Celje Pivovarna Lasko esloveno, donde permaneció hasta el pasado mes de febrero.
En esa fecha en la que regresó a la Bundesliga alemana para jugar en el modesto Bergischer, al que Prieto tratará de ayudar a salvar la categoría antes de enrolarse en una de las plantillas más potentes del continente, la del Copenhague danés.