Cesc Fábregas, centrocampista de la selección española, destacó ayer la confianza de la afición en el equipo, esperó darle una "gran satisfacción" en la final frente a Italia y aseguró que el que gane "va a demostrar claramente que es el mejor" del torneo.

"Tenemos la suerte de ser un país muy futbolero, probablemente de los más que hay en el mundo. Siempre transmite más alegría y satisfacción ganar en los penaltis (en las semifinales del pasado miércoles frente a Portugal), pero creo que la gente se echó a la calle habiendo ganado a Francia, Irlanda...", recordó.

"En todo momento se han echado a la calle para ayudarnos y muchos, con muchas dificultades, han viajado aquí a apoyarnos. Es una satisfacción saber que tenemos todo el país detrás. Siempre hemos notado ese calor hacia nosotros, hemos confiado en ellos y ellos en nosotros. El domingo (mañana), esperamos dar una gran satisfacción y poder celebrarlo el lunes", dijo.