David Meca hizo de la natación su modo de vida. Más de 30 años superando todo tipo de retos, que lo han convertido en un referente del deporte nacional y mundial. Embajador de estos Juegos, el nadador catalán proclamó que "es un orgullo" formar parte de esta competición tan relevante. "Tenemos la oportunidad de enseñar al mundo lo bonita que son nuestras Islas Canarias, y lo bien preparado que están los policías y bomberos de aquí", destacó.

¿Qué supone para usted ser el embajador de los Juegos?

Cuando me contaron hace unos años que existía esta posibilidad, ya tenía muchas ganas de que llegara este día. Para mí, venir a Tenerife con motivo de esos Juegos es un placer y un orgullo. Además, tenemos la oportunidad de enseñar al mundo lo bonitas que son nuestras Islas Canarias, y lo bien preparados que están los policías y bomberos de aquí. Nada más comenzar el campeonato, en la primera prueba, la de aguas abiertas en Las Teresitas, los tres primeros fueron deportistas canarios: oro, plata y bronce. Tenemos los mejores cuerpos de policías y bomberos de toda Europa.

¿Está sorprendido del nivel de estos Juegos, que han congregado a más de 2.300 deportistas?

El esfuerzo de todos para sacar adelante estos Juegos ha sido brutal. Desde aquí quiero felicitar a la organización, porque es una barbaridad organizar más de 70 deportes. Sé que todo va muy bien. La gente viene a competir, pero también con sus familias, a pasarlo bien, y a disfrutar de Tenerife, algo igualmente muy importante.

¿Cuáles son los próximos proyectos de David Meca?

Sigo entrenándome, seis horas diarias, y no he dejado la piscina. Me retiré de la alta competición después del oro en mi último campeonato del Mundo en Montreal. Pero tengo el gusanillo de seguir. A mis 38 años, me veo todavía fuerte, y creo que dentro de poquito afrontaremos uno de esos retos que van a servir para demostrar que no estoy mayor (risas).

¿Le gustaría que ese reto se pudiera hacer en Canarias?

Estaría genial. El primero que hice en las Islas fue desde La Gomera a Tenerife, y no estaría nada mal, 15 años después, volver a intentarlo, e incluso tratar de batir esa marca. De verdad que me veo mejor que cuando tenía 18 años.

Entonces, físicamente se puede decir que atraviesa por uno de sus mejores momentos...

Me siento muy bien, y prueba de ello es que me sigo entrenando a un nivel altísimo, con marcas buenas. Pienso que en la vida todo está en la cabeza. Si nos vemos capacitados y tenemos ilusión, la ilusión nos permite conseguirlo todo. Me veo capacitado para lograr cosas, como nadar entre La Gomera y Tenerife, o hacer las siete Islas en siete días (risas). No, tampoco. En su momento fue una locura, incluso que se me hubiera planteado, y hoy lo sigue siendo.

¿Podrá alejarse de las piscinas o de nadar a mar abierto?

La natación me lo dio todo. Le he dedicado 33 años de mi vida a la competición y sé que nunca lo dejaré. Unos morirán con las botas puestas, y yo lo haré con el bañador puesto. Quiero demostrar que con trabajo, esfuerzo, dedicación e ilusión, uno nunca está mayor para nada.